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Los más jugones en España estamos de enhorabuena. Los dispositivos gaming hace unos años eran una rareza y ahora, son productos comunes al alcance de todos. Especialmente en el terreno de los monitores. Existen opciones monstruosas que incluso alcanzan las 57 pulgadas e incluso ya hay opciones OLED que se ven tremendamente bien. Sony es una de esas firmas que sigue adelante con su gama gaming, y hemos probado uno de sus monitores insignia: el INZONE M9 II.

Desde hace unos años Sony ha estado nutriendo a sus gamas INZONE de productos tremendamente destacados, que van desde monitores hasta auriculares. El INZONE M9 II es la segunda generación de un monitor gaming que ya dejó un sabor de boca increíble gracias a sus prestaciones. En este caso, Sony vuelve a intentarlo apuntando directamente a los jugadores más hardcore, con un monitor de 999 euros en España.

Una etiqueta de precio considerable, desde luego, pero que viene acompañada de grandes virtudes, como un brutal panel 4K de 27 pulgadas a 160 Hz de tasa de refresco. Un panel que además comparte bastantes bondades con los televisores BRAVIA de gama alta de Sony, añadiendo por el camino una espectacular integración con PlayStation 5 que en mi caso concreto me ha venido de perlas.

Por fin el diseño es importante

Normalmente, el diseño y la estética de los monitores gaming suele ser el apartado más descuidado con diferencia. Solo en la gama alta vemos añadidos interesantes y en muchas ocasiones, ni siquiera sirven de mucho. Si algo define a este Sony INZONE M9 II es que su diseño es increíblemente ingenioso, y está repleto de detalles interesantes que harán las delicias de los jugadores más abnegados.

Su principal secreto se encuentra en la peana. Sony ha pasado de una peana en forma de trípode que era llamativa, pero bastante voluminosa en espacio, a una circular y muy reducida en dimensiones. Que sea tan pequeña (apenas supera el diámetro de un CD) da una ventaja enorme a los jugadores competitivos, que suelen tener el teclado y el ratón muy cerca del monitor, casi debajo del mismo. Este detalle parece nimio, pero da un sinfín de posibilidades.

Sony INZONE M9 II. Manuel Fernández Omicrono

Me gusta aprovechar el espacio de mi escritorio, y más de una vez me he visto limitado por el espacio que ocupan las peanas de los monitores gaming. Sony se quita todo esto de en medio; gracias a este espacio extra, puedo poner todo tipo de objetos debajo del monitor. Un mini ordenador, las luces portátiles que uso para dar ambiente al setup, mis periféricos... por fin mi escritorio se ve liberado de ste problema.

Pero que sea circular tiene otra ventaja. La peana se gira en 360 grados, y hace que el INZONE M9 II sea un monitor totalmente giratorio. Esta es, de lejos, la función que más me ha gustado de este monitor. Mover los monitores de este estilo para acceder a los puertos y cambiarlos siempre ha sido una tarea engorrosa y complicada. En este caso, basta con girar la pantalla, y la peana hace un movimiento suave y preciso, ya que el monitor hace de centro de gravedad para la peana.

Sony INZONE M9 II. Manuel Fernández Omicrono

A esto hay que sumarle que el propio INZONE M9 II es un monitor articulable al máximo. Se puede alzar, bajar, inclinar para arriba y para abajo y hacia los lados. Es un monitor personalizable, hasta puntos que los jugadores menos duchos en materia ni reconocerán. Además, el acceso a los puertos traseros no es especialmente inaccesible; basta con encontrar el puerto gracias a su serigrafía de indicación, y ya está.

No faltan los detalles que se agradecen. Junto al botón de encendido y apagado (también muy accesible) se encuentra un práctico joystick que servirá para que el usuario se mueva a lo largo de los menús con facilidad. Nada de botones molestos y complicados; esta palanca hará las veces de control, y funciona a las mil maravillas.

Por último, me gustaría destacar lo sobrio del diseño de este INZONE M9 II. Estoy bastante cansado de los monitores gaming que parecen naves espaciales y que integran luces que en la mayoría de ocasiones ni siquiera se ven. Un monitor plano, con bordes muy reducidos, sin florituras. Pasa desapercibido en la mesa y es minimalista. No atraerá las miradas, y eso nos encanta.

Una bestia para el gaming

Las 27 pulgadas de diagonal pueden antojarse escasas para algunos, pero la clave de este tamaño no solo está en su orientación al gaming competitivo, sino en todo el hardware y tecnologías que monta este panel. Porque de nuevo, el INZONE M9 II presume de una pantalla IPS LCD de gran calidad con resolución 3.840 x 2.160 y una tasa de refresco máxima de 160 Hz.

Sony INZONE M9 II. Manuel Fernández Omicrono

Estas especificaciones se unen a las tecnologías de sincronización clásicas, como Adaptive Sync, Nvidia G-SYNC y las frecuencias de actualización variables del puerto HDMI 2.1. Porque sí; entre otras cosas, el INZONE M9 II monta un puerto HDMI 2.1 muy útil para usar con tu PlayStation 5. Su tiempo de respuesa es de 1 milisgundo, y tiene tecnología Full Array Local Dimming y escaneo de retroiluminación.

Su brillo máximo es de 750 cd por metro cuadrado, dispone de DisplayHDR 600 y HDR10 y HLG. Es decir, que no es un monitor que sacrifique la calidad de imagen en pos de una mayor velocidad competitiva. Todo lo contrario. La tecnología que integra el monitor proviene de los modelos BRAVIA de la compañía, y prueba de ello es su profundidad de 10 bits y su gama de colores del 95% en el espacio DCI-P3.

Sony INZONE M9 II. Manuel Fernández Omicrono

En términos simples, el INZONE M9 II es un monitor espectacular en calidad de imagen. Se ve sencillamente increíble, con una definición brutal y con una gestión del rango dinámico y el HDR digna de mención. El detalle es extremo, ya que recordemos que estamos dotando a un panel relativamente compacto de 27 pulgadas de una resolución 4K altísima.

Estas son gratas noticias, ya que normalmente los monitores más rápidos sufren de falta de detalle y de una mala calibración de color, haciéndolos inadecuados para ver películas y series. El INZONE M9 II aspira a ser el monitor central de la experiencia multimedia del jugador. Cuando no está jugando, puede disfrutar de consumir contenido con altas prestaciones sin necesitar un televisor.

Y no, estas prestaciones no son inútiles de cara al videojuego puro y duro. La resolución 4K permite que todos los elementos de la imagen se vean muy detallados y claros, lo que en juegos competitivos es sin duda una ventaja. La calibración de color también nos ayuda a distinguir ciertos grafismos importantes de manera más visual (el color de los enemigos, las señales visuales en ciertos juegos, etcétera).

Un ejemplo. En el título Overwatch 2 he podido rastrear mejor a mis enemigos al poder verlos de forma más definida en la pantalla. La espectacular calibración de color del INZONE M9 II también ha conseguido que sea más consciente de algunas señales visuales; el rojo del color de mis enemigos, el amarillo de la sanación de los curanderos, el azul de mis aliados...

Sony INZONE M9 II. Manuel Fernández Omicrono

Incluso he probado a jugar en mi PlayStation 5, ya que de nuevo este monitor disfruta de una integración especial con la consola de Sony. El monitor se adapta con VRR y Auto HDR Tone Mapping gracias a la conexión HDMI 2.1 de la consola, permitiendo esa ansiada tasa de refresco de 120 Hz en 4K con títulos compatibles. Así, el INZONE M9 II se postula como un monitor idóneo para jugadores de PC y más importante aún, para jugadores de consola.

Por último, he de destacar la app INZONE HUB disponible en PC que, como ya es habitual en los terrenos gaming, da increíbles posibilidades de personalización a los jugadores. Estos pueden ajustar prácticamente cualquier parámetro del monitor, como el tiempo de respuesta, el brillo, el contraste, el Local Dimming... los jugadores profesionales verán en el INZONE M9 II un muy buen aliado en combate.

Sony INZONE M9 II. Manuel Fernández Omicrono

Eso sí, no todo iba a ser color de rosa. Su único punto negativo es su altavoz integrado, que como era de esperar, no da la talla. De hecho creemos que carece totalmente de sentido. La mayoría de usuarios, sobre todo los más proclives a esta clase de productos, usan o bien altavoces de alta gama o simplemente usan auriculares gaming. No sirven para mucho y creemos que casi hubiera sido mejor prescindir de este altavoz.

¿Me lo compro?

Lógicamente, el Sony INZONE M9 II no es un monitor orientado a todos los públicos. El usuario promedio que simplemente quiere una pantalla para su ordenador verá desproporcionada la etiqueta de 999 euros en España. Pero los jugadores más entusiastas que equilibren su tipo de juego entre un PC y una consola tendrán una gran experiencia con el monitor. Tanto, que es casi barato en comparación.

Sony INZONE M9 II. Manuel Fernández Omicrono

La mayoría de monitores 4K que tienen tasas de refresco similares o que integran paneles OLED superan holgadamente los 1.000 euros de precio y solo unos pocos se mueven en el rango por debajo de los 1.000 euros. Existen opciones más baratas, sí, pero o bien pierden prestaciones o bien sufren en la calidad de imagen. Si eres un usuario de PC y de PlayStation y quieres sacarle el máximo partido a tus máquinas, ni te lo pienses; el INZONE M9 II es una opción espectacular.