La NASA intentará arreglar las fugas de Artemis en la plataforma de lanzamiento
Aún así, es posible que el cohete deba volver a su edificio de ensamblaje para nuevas reparaciones, lo que podría retrasar todavía más la misión.
8 septiembre, 2022 09:43El cohete lunar Artemis 1 de la NASA, que el pasado sábado canceló por segunda vez su despegue, se queda en la plataforma de lanzamiento 39B de Cabo Kennedy, al menos de momento. Cuando todo parecía indicar que sería necesario devolverlo al edificio de ensamblaje para reparar las fugas en el propulsor de hidrógeno líquido que propiciaron el aplazamiento, la agencia espacial ha decidido intentar resolver el problema in situ. Eso puede acelerar el próximo lanzamiento, que tendría lugar a mediados de octubre, pero tampoco se descarta que sean necesarias nuevas y más complejas reparaciones.
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La fuga que impidió el lanzamiento el pasado sábado se produjo en una "desconexión rápida" de la interfaz que conecta la etapa central del SLS con una línea de abastecimiento de combustible que sale de la torre de lanzamiento móvil del cohete gigante.
Después de analizar el problema durante unos días, el equipo de Artemis 1 ha decidido sustituir la junta de la desconexión rápida que funciona mal, según anunciaron los responsables de la agencia en su último comunicado.
Cómo van a arreglar el SLS
Las reparaciones se llevarán a cabo en la plataforma 39B del Centro Espacial Kennedy en Florida, donde el cohete SLS con la nave Orión en su interior ha estado preparándose para el lanzamiento desde la última semana de agosto.
"Realizar el trabajo en la plataforma requiere que los técnicos instalen un recinto alrededor del área de trabajo para proteger el hardware del clima y otras condiciones ambientales, pero permite a los ingenieros probar la reparación bajo condiciones criogénicas, o superfrías", han revelado los ingenieros de la NASA en un comunicado.
Llevar a cabo el trabajo en la plataforma "también permite a los equipos recoger tantos datos como sea posible para entender la causa del problema", añadieron. "Los equipos pueden devolver el cohete al Edificio de Ensamblaje de Vehículos (VAB) para realizar trabajos adicionales que no requieren el uso de las instalaciones criogénicas disponibles sólo en la plataforma".
A pesar de todo, el regreso al edificio de ensamblaje puede ser imprescindible. La Fuerza Espacial de EE.UU. ha certificado el sistema de terminación de vuelo (FTS) de Artemis 1, que autodestruiría el cohete si se desviara de su curso durante el despegue, pero sólo para un tramo de 25 días. Ese plazo terminará el 19 de septiembre, cuando justo cuando se abre la próxima ventana de lanzamiento del cohete.
La Fuerza Espacial exige que las baterías del sistema de terminación del SLS se recarguen cada cierto tiempo para garantizar su buen funcionamiento. El problema es eso solo puede llevarse a cabo en el edificio de ensamblaje del cohete, lo que significa que tendrían que sacarlo de la plataforma. Así iniciaría su lento retorno de vuelta al edificio a poco más de seis kilómetros de distancia, un viaje que puede llevar unas ocho horas por la complejidad de la carga y que ampliaría una vez más los costes de la misión.
A la espera de lo que finalmente decidan funcionarios y mandatarios de la NASA, Artemis tiene dos ventanas de lanzamiento disponibles en los próximos dos meses. La primera va del 19 de septiembre al 4 de octubre, y la segunda estará abierta del 17 al 31 de octubre. Un regreso al edificio de ensamblaje pondría casi con toda seguridad fuera de alcance la primera ventana.