Marruecos se ha convertido en el primer país africano en enviar tanques a Ucrania. El protagonista del nuevo movimiento estratégico es el carro T-72 que tan popular está siendo en la contienda por servir tanto en el lado ruso como en el ucraniano. Y llegará al campo de batalla antes que los Leopard de España, cuyo anuncio de envío se publicó en la mañana del miércoles y los trabajos de reparación se prolongarán durante las próximas semanas.
El T-72 es el candidato perfecto para integrarse en las filas de Volodímir Zelenski debido a que su ejército ya está más que familiarizado en su operación. El entrenamiento de las tropas es prescindible y, además, disponen de un nutrido banco de recambios y repuestos que pueden emplear en caso de necesidad.
La presencia del tanque en territorio marroquí se remonta a los años 1999 y 2000, cuando Rabat adquirió un total de 148 unidades —136 del modelo T-72B y 12 del T-72BK— a Bielorrusia. En un primer momento, tal y como recogió el mes pasado Africa Intelligence, Estados Unidos habría conseguido convencer a Marruecos del envío de repuestos provenientes de los tanques T-72 al ejército ucraniano; sin aportar más detalles.
Pero los últimos reportes provenientes del medio argelino Mena Defense indican que Marruecos ha ido mucho más allá en su apoyo a Zelenski y ya ha enviado un lote de 20 tanques T-27 completamente operativos. Pudiendo llegar a 30 próximamente, según Defence 24. Estas unidades se encontraban en reparación en la República Checa y aparecieron el pasado día 9 en la visita del primer ministro del país a las instalaciones de la compañía Excalibur Army, la encargada de realizar los trabajos de puesta a punto.
Por su parte, el director comercial de Excalibur Army, Richard Kubena, explicó al diario checo Novinky que la puesta a punto de los carros de combate T-72 para su posterior envío a Ucrania está siendo sufragada por Estados Unidos y Países Bajos. No mencionó explícitamente que las unidades pertenecían a Marruecos, pero sí indicó que se trata de un "cliente africano". Por el momento, ninguno de los países involucrados en este envío se ha pronunciado.
El T-72 soviético
Tras el desarrollo en los años 50 del tanque T-64, la Unión Soviética se topó con un par de grandes problemas: el que prometía ser su carro de combate estrella había resultado ser demasiado caro de fabricar y poco fiable. Algo que situaba a Moscú con una clara desventaja frente a Estados Unidos en caso de tener que fabricar en serie el tanque.
Para intentar paliar estos problemas y tras una serie de decisiones políticas, Moscú adjudicó a la compañía estatal Uralvagon KB un proyecto para que desarrollara una nueva versión del T-64 que cumpliera con algunos requisitos. Se trataba realmente de un modelo de movilización que permitiera altas tasas de producción en cadena a menor precio en caso de que se desencadenara una guerra.
Y así es como apareció el T-72. Un tanque que nació como un parche para solucionar los problemas del T-64 y que se convirtió en toda una institución por sí solo. Entró en servicio en 1973 y desde entonces se estima que se han fabricado más de 25.000 unidades de T-72 gracias a su éxito de exportación y a la creación de una gran cantidad de variantes y subvariantes.
El T-72B, el modelo más numeroso en las filas de Marruecos, entró en servicio en 1985 para la incorporación de mejoras tecnológicas importantes. Se instaló un nuevo sistema de control de disparo junto a un visor que permitía el uso del misil antitanque 9M119.
La munición también es de desarrollo original soviético y cuenta con un sistema de proyectiles guiados por láser compatibles con cañones de 125 milímetros. Pueden llegar a tener un peso de hasta 17,2 kilogramos, dependiendo de la versión, y la ojiva está representada por una carga hueca dispuesta en tándem. Tiene una velocidad máxima que subsónica y puede alcanzar los 5 kilómetros de rango operativo.
También incorpora un blindaje más grueso que el modelo básico. Cuenta con 20 milímetros más aplicado en la parte delantera del casco y refuerzos en la parte frontal y superior de la torreta al que se añade un sistema de blindaje compuesto.
En el apartado mecánico, el T-72B acomoda un motor de 840 caballos de potencia que le permite alcanzar velocidades superiores a los 60 kilómetros por hora con las 44,5 toneladas de esta versión en orden de combate. El tanque de combustible le confiere una autonomía de 470 kilómetros.
Posible sustituto americano
Una de las posibles contrapartidas que se manejan tras el envío de tanques de Marruecos es que Estados Unidos ceda al país africano excedentes de sus carros M1 Abrams. Rabat ya cuenta en su ejército con el modelo M1A1SA —M1A1 Special Armor, diseñado para Marruecos— que finalizó el proceso de entrega de 222 unidades en agosto de 2018 y con el M1A2, el más moderno y del que dispone 162 unidades.
El equivalente directo de los T-72 serían la versión M1A1 que comenzó la producción en 1986 y se prolongó hasta 1992. Tiene un peso de algo más 61,3 toneladas, una velocidad máxima de 72 kilómetros por hora y una autonomía de unos 400 kilómetros.
Este modelo de tanque tiene un cañón de 120 milímetros de diseño alemán que no es otra que una variante del cañón empleado en los tanques Leopard, haciendo que la munición sea compatible. Dispone de todo tipo de municiones entre las que se encuentran perforadoras y de alto explosivo especialmente diseñadas para atacar a tanques.
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