El viejo portaviones brasileño se irá al fondo del Atlántico: ya han comenzado a hundirlo
La Marina ha comunicado que han comenzado la operación a unos 350 kilómetros de la costa y supondrá una grave contaminación por asbestos.
4 febrero, 2023 12:26El portaviones São Paulo se irá, finalmente, al fondo del océano Atlántico. La falta de acuerdo entre administraciones gubernamentales ha terminado con la decisión de la Marina de Brasil de hundir el barco ante la falta de una compañía que lo pueda reciclar, un proceso que siguen todas las embarcaciones en España.
El caso del buque de guerra es más delicado de lo que puede parecer debido a la gran cantidad de asbestos que acumula. El pasado verano, la compañía turca que había adquirido el buque para el desmantelamiento controlado no consiguió los permisos de atraque necesarios y el São Paulo tuvo que darse la vuelta cuando ya se encontraba cerca de Gibraltar.
En ese momento, el Ministerio de Medio Ambiente brasileño ordenó el regreso del buque al país empleando un remolcador, pero todos los puertos capaces de acoger a la embarcación rechazaron el atraque. A partir de ese momento, el São Paulo se convirtió en un quebradero de cabeza con una muy complicada solución.
Según un comunicado de la Marina de Brasil emitido el viernes por la noche, los trabajos para el hundimiento del portaviones ya han comenzado en un lugar a 354 kilómetros de la costa noreste del país. En la nota no se proporcionan más detalles sobre cómo se llevará a cabo esta compleja operación y tampoco dejan realmente claro si el barco ya está en el lecho marino, según The New York Times.
El material tóxico a bordo del São Paulo podría alterar los ecosistemas, matar animales y plantas y envenenar las cadenas alimentarias marinas con metales pesados, según la Agencia Ambiental de Brasil (IBAMA). La directora interina del departamento de calidad ambiental de IBAMA, Rosángela Muniz, explicó que la agencia había pedido información a la Marina, incluido el método que se usaría para hundir el barco. Pero no han recibido respuesta.
El São Paulo entró en servicio en julio de 1960 en la Marina Francesa y pasó a la brasileña en 2001, donde permaneció en activo 16 años. Tiene una eslora de 265 metros, 51,2 de manga y 32.800 toneladas a plena carga.
Cuando se diseñó era uno de los portaviones más modernos y avanzados del mundo con la última tecnología a bordo. Contaba con todo tipo de radares, sistemas de guerra electrónica con contramedidas y armamento como misiles. También disponía de un sistema de propulsión de 126.000 caballos de potencia que se generaban a partir de 2 turbinas y le permitían una autonomía de hasta 13.890 kilómetros con 1.017 tripulantes a bordo.
El portaviones fue la base de operaciones del ala embarcada de Brasil que se compone de aviones de combate Douglas A-4 Skyhawk. En total, podía acomodar entre 10 y 16 unidades. Este caza entró en servicio en Estados Unidos en los años 50 y cuenta con un peso máximo al despegue de 11.136 kilogramos que se impulsan con un único motor.
El caza tiene una velocidad máxima de 1.077 kilómetros por hora —por debajo de la velocidad del sonido— con un techo de vuelo de casi 13.000 metros. En el apartado del armamento cuenta con un par de cañones y compatibilidad para una gran variedad de bombas, misiles y cohetes. El São Paulo también contaba con espacio para helicópteros.