Unas 24 horas después de que Starlink, la empresa de Elon Musk, anunciará que comenzará a probar la cobertura móvil de su servicio de conexión satelital, Amazon presenta también novedades en su proyecto Kuiper. El gigante de las compras por internet ha presentado su gama de antenas receptoras para ofrecer internet satelital por todo el mundo como hace su rival que ya opera en España.
Amazon dice que sus diseños son "más pequeños, más asequibles y más capaces" que los de la competencia, referencia que se puede aplicar a Starlink de la empresa espacial de Elon Musk. Han presentado tres antenas diferentes cuya velocidad de conexión va desde los 100 y 400 Mbps para particulares, hasta 1 Gbps para empresas.
El Proyecto Kuiper es la iniciativa de Amazon para conectar a las personas de todo el globo a internet mediante una constelación de satélites de órbita terrestre baja. Se espera que Amazon lance su primera ronda de satélites en la primera mitad de 2024 y debería activar el servicio para sus primeros clientes ese mismo año. Sin embargo, todavía no está claro dónde comenzará a ofrecer Internet, ni cuánto costará exactamente el servicio.
"Nuestro objetivo con el Proyecto Kuiper no es solo conectar a las comunidades desatendidas y desatendidas, sino también deleitarlos con la calidad, la confiabilidad y el valor de su servicio", dice en el comunicado Rajeev Badyal, vicepresidente de tecnología de Amazon para el Proyecto Kuiper.
El dispositivo más compacto de los tres que ha presentado Amazon es una pequeña antena para poder transportar con facilidad que pesa solo una libra (200 gramos) y mide 7 pulgadas cuadradas, lo que se traduce en 18 centímetros. Se trata del modelo más asequible para quién quiera usarlo de viaje y ofrecería 100 Mbps.
Le sigue el modelo estándar. La antena mide 11 pulgadas cuadradas y solo una pulgada de grosor (27 y 2 cm), además pesa menos de cinco libras (kilogramos), sin contar el soporte. Para quienes opten por esta opción fija en su casa, la conexión alcanzará los 400 Mbps. Su coste de producción se acercará a los 400 dólares, según los cálculos del fabricante, por lo que el precio de venta del equipo superaría los 370 euros al cambio actual.
La competencia, es decir, Starlink, ha llegado ya a España con un precio de 450 euros el equipo necesario y 70 euros la suscripción al servicio, así como 23 euros de envío y gestión. Es una inversión importante que aporta una velocidad de entre 50 y 250 Mbps en el programa estándar. También cuenta con una opción portátil.
La empresa anunció el año pasado una opción más premium de 150 a 500 Mbps, cuya antena cuesta 2.500 dólares, pero no está disponible en todos los países. En el lado opuesto, Amazon habla de una tercera antena para empresas, instituciones gubernamentales y telecomunicaciones que mide 19x30 pulgadas y ofrecerá velocidades de hasta 1 Gbps.
Estos terminales equipan un chip de banda base diseñado por Amazon, bajo el nombre en clave "Prometheus". Combina la potencia de procesamiento de un chip de módem 5G como los que se encuentran en los smartphones modernos, la capacidad de una estación base celular para manejar el tráfico de miles de clientes a la vez y la capacidad de admitir conexiones punto a punto potentes.
El chip también se encuentra en los satélites que pretende desplegar la compañía y les permite, según explican, procesar hasta 1 terabit por segundo (Tbps) de tráfico a bordo de cada satélite. Se espera que la producción en masa de estos satélites comience a finales de 2023. Mientras dos modelos de prueba se lanzarán al espacio en el primer vuelo del cohete Vulcan Centaur de United Launch Alliance (ULA) para probar toda la red de comunicaciones extremo a extremo.