El cohete español que rivalizará con SpaceX, Miura 1, ha completado con éxito la última prueba decisiva para enfrentarse al primer lanzamiento en los próximos días. De noche, la empresa PLD Space ha encendido el motor durante 5 segundos como prueba final para preparar el cohete ante el despegue inminente. Lo ha hecho en el centro espacial de El Arenosillo (Huelva), donde se trasladó el Miura 1 desde Elche y desde donde será disparado al espacio.
"¡Estamos muy contentos de poder anunciar que ayer completamos con éxito nuestro hot test de 5 segundos, correspondiente al vuelo experimental MIURA1 SN1 Test Flight!" ha celebrado la empresa de Alicante PLD Space en redes sociales. 12 años después del inicio de esta compañía espacial española en Elche, están a punto de hacer historia en el panorama científico y tecnológico de España.
El objetivo de este primer vuelo de prueba de Miura 1 SN1
persigue en recabar el mayor volumen de información posible para seguir
validando gran parte del diseño, la tecnología y procesos que posteriormente
se transferirá e integrará en Miura 5. Está previsto que Miura 5 inicie su actividad en 2025, para ello, ya se está trabajando en su desarrollo en las instalaciones de la compañía dentro del recinto del aeropuerto de Teruel.
Miura 1 está listo
El Miura 1 tiene 12 metros de largo por 70 centímetros de diámetro y pesa casi 3 toneladas al despegue. Desde la compañía esperan llegar hasta la frontera que separa la atmósfera y el espacio, a unos 100 kilómetros de altitud. La carga de pago que puede llevar el cohete es de 100 kilogramos.
Ya instalado en la plataforma de lanzamiento, este ensayo final, también conocido hot test, ha consistido en una prueba estática de fuego en la que se ha encendido el motor a pleno rendimiento durante solo 5 segundos para comprobar su perfecto funcionamiento. Tras esta prueba de fuego, INTA y PLD Space formalizarán la revisión de vuelo y ya sí estará listo para ejecutar su primer despegue que aún no se conoce fecha definitiva, pero la ventana de pruebas de vuelo asignada por el Ministerio de Defensa se ha extendido hasta el 31 de mayo.
Además de despegar, el cohete también tiene como misión en este primer lanzamiento transportar un experimento del Centro Alemán de Tecnología Aplicada y Microgravedad, perteneciente a la Universidad de Bremen. Con el objetivo de probar algunas de sus tecnologías en microgravedad.
Despegue en Huelva
"Si durante el procedimiento del lanzamiento, que dura unas 10 horas, se detecta un mínimo factor de riesgo; se abortará la operativa de ese día y se iniciará de cero la próxima ventana de vuelo", explica Raúl Torres. "Nuestro objetivo es conseguir un hito para España y Europa, pero aún tenemos todo por demostrar", concluye Ezequiel Sánchez, presidente ejecutivo de PLD Space.
Durante todo el proceso de preparación y lanzamiento del cohete, nadie se encontrará en la zona de lanzamiento. Igual que ocurre con otras instalaciones espaciales, todo el control de la misión se realiza a distancia. En el caso de El Arenosillo, el personal se encontrará a unos 5,5 kilómetros del lugar de despegue y emplearán los sistemas del INTA y del Ministerio de Defensa para el seguimiento.
Estas ventanas reservadas deben coincidir con la disponibilidad técnica del cohete y con unas buenas condiciones meteorológicas. El lanzamiento requiere de una velocidad de viento en superficie inferior a los 20 km/h, una atmósfera calmada de vientos en altura y ausencia de potenciales tormentas en las proximidades.