La necesidad de relevo de la Estación Espacial Internacional —que tiene previsto estar operativa hasta 2030 — acaba de resolverse con un nuevo acuerdo de colaboración entre la rama de defensa y espacio de la europea Airbus y la estadounidense Voyager Space. Según han publicado ambas compañías, esta iniciativa allana el camino a una nueva empresa conjunta transatlántica para desarrollar, construir y operar Starlab, una estación espacial comercial pensada como continuación de la ISS.
"Estamos orgullosos de escribir el futuro de las estaciones espaciales con Airbus", afirma Matthew Kuta, presidente de Voyager Space. "La Estación Espacial Internacional está ampliamente considerada como la plataforma de cooperación global más exitosa de la historia, y estamos comprometidos a construir sobre este legado a medida que avanzamos con Starlab".
Voyager recibió en diciembre de 2021 un contrato de la NASA para el desarrollo de una estación espacial de vuelo libre con tripulación permanente y al servicio de la agencia estadounidense y de "una base mundial de clientes formadas por agencias espaciales e investigadores", recoge la nota de prensa. La misión del programa es mantener la presencia humana continuada y el "liderazgo estadounidense en la órbita terrestre baja".
La compañía estadounidense seleccionó a Airbus para proporcionar apoyo técnico de diseño y experiencia en un acuerdo hecho público a principios de este año. "Con un historial de innovación y primicias tecnológicas, Airbus se enorgullece en asociarse con empresas que buscan cambiar la historia", declara responsable de Space Systems en Airbus Jean-Marc Nasr.
"Esta aventura transatlántica con huellas a ambos lados del océano alinea los intereses tanto nuestros como de Voyager y de nuestras respectivas agencias espaciales". Asimismo, indica que se trata de una "aventura pionera" para un liderazgo continuado europeo y americano en el espacio que "hace avanzar a la humanidad".
Tene previsto lanzarse en el año 2028 en un único vuelo con un laboratorio científico a bordo completo y eliminando la necesidad de ejecutar varios lanzamientos para complementar la plataforma. Algo muy común en este tipo de misiones. Se trata, además, de la primera estación espacial con una habitabilidad de nueva generación gracias a que el equipo de diseño de la cadena hotelera Hilton está ayudando en el desarrollo de las habitaciones y de las zonas comunes a bordo.
"Starlab proporcionará un acceso ágil y simplificado a la infraestructura de investigación en el espacio y en la Tierra", según indican en su página web. Contará con diferentes estaciones de trabajo enfocadas en las investigaciones biológicas, vivero, física, materiales y un espacio abierto a otras ramas científicas.
"Hoy se da un gran paso adelante para el futuro de los destinos espaciales comerciales", continúa Kuta. "Estamos orgullosos de contar con la confianza de la NASA para construir un sustituto de la ISS, una asociación que amplía el ecosistema de Starlab a las agencias espaciales mundiales".
En paralelo, la NASA —junto con la ESA europea y otras agencias espaciales— se encuentran trabajando en el orbitador lunar Gateway. Otra estación espacial más enfocada en el regreso de la humanidad a la Luna y en el potencial futuro para la exploración interplanetaria.