Francia ha sido uno de los últimos países en prepararse ante la escalada bélica que está sufriendo el mundo en los últimos meses. Tal y como se ha sabido en España, las Fuerzas Aéreas Estratégicas de Francia han conseguido disparar un misil nuclear supersónico renovado, un ASMPA-R, desde un avión de combate Rafale B en el marco de la operación DURANDAL.
Este fue un ensayo realizado en territorio nacional, el cual tiene como objetivo la "credibilidad operacional" de Francia. Dicho misil era un ASMPA-R renovado, que no poseía ningún tipo de carga militar a bordo, tal y como confirmó el ministro francés de Defensa Sébastien Lecornu.
Un proyectil diseñado por la firma de operaciones militares y fabricante de misiles MBDA, y que es la punta de lanza del programa de renovación del ASMP-A, liderado por la Dirección General de Armamento francesa (DGA). La idea es renovar los misiles Air-Sol Myoenne Portée o SMP, los misiles crucero aire-tierra de mediano alcance y que llevan en activo desde el año 1986.
Los misiles ASMP-R supersónicos
Tal y como confirmó el propio Lecornu, este primer disparo de evaluación se llevó a cabo después de un vuelo que intentaba simular un ataque nuclear, dentro de la operación DURANDAL. Además del Rafale B que disparó el misil, estaba presente una formación de aviones que incluyeron aeronaves de reabastecimiento de combustible Airbus A330 Phénix y cazas Rafale B.
Estos misiles tienen su origen en el modelo ASMP original del año 1986. Originalmente, el desarrollo de este misil fue realizado por la División de Misiles Tácticos de Aéroespatiale, la cual forma parte de la MBDA. El primer misil que entró en servicio en el año 86, tenía como objetivo reemplazar las bombas AN-22 y AN-52M que por aquel entonces estaban en servicio. En 1991 se produjeron alrededor de 90 misiles y 80 ojivas.
Esta versión original tenía una masa de 860 kilos y una longitud de 5,38 metros, y tenía una ojiva nuclear TN 81 que tenía un rendimiento variable de entre 100 y 300 kilotones de TNT. Los ASMP se valían de un estatorreactor de combustible líquido, que impulsaba estos misiles a velocidades máximas de Mach 3, y tenían un rango operacional de 300 kilómetros. En 1997 llegó su versión mejorada, el ASMP-A, que subía el alcance a 500 kilómetros (dependiendo siempre del perfil de vuelo).
Su nueva versión mejorada, el Air-Sol Moyenne Portée-Amélloré ASMP-A (o ASMP mejorado) pasó a tener una ojiva termonuclear TNA (ojiva nuclear aerotransportada) de 300 kilotones, y entró en servicio en el año 2009, con el Mirage 2000NK3. El ASMPA-R es básicamente el proyecto de renovación lanzado en el año 2016, que busca mejorar el alcance del misil y añadir una nueva ojiva termonuclear.
Esta fue la versión puesta a prueba en la operación DURANDAL, pero sin ojiva nuclear incorporada. Según resalta el Ministerio de las Fuerzas Armadas de Francia en su comunicado, el programa de renovación de este misil liderado por la DGA pudo "fortalecer las prestaciones intrínsecas del misil", potenciando la credibilidad del componente nuclear de este misil "en el ámbito de la disuasión".
Cabe destacar que si bien el ASMPA-R es un proyecto actualmente en activo para renovar el misil ASMP-A lanzado a principios de los años 2000, Francia sigue poniendo la mirada en la llegada del futuro misil nuclear aire-tierra de cuarta generación, el ASN4G, que llegará presumiblemente en el año 2035.
El objetivo de esta iniciativa, que resultará en el sucesor definitivo de los misiles ASMP, es construir un misil capaz de realizar vuelos supersónicos que incluso puedan llegar a estar catalogados como hipersónicos ante la posibilidad de que pueda alcanzar velocidades Mach 7 u 8. Actualmente el ASN4G está siendo desarrollado por ArianeGroup, y estaría diseñado para ser transportado por aviones de combate Rafale. Además, contarían con un alcance superior a los 1.000 kilómetros.