Los planes sobre la destrucción de la ISS no son desconocidos en España. Potencias como Rusia y China siguen buscando tener sus propias estaciones espaciales. Incluso Jeff Bezos, de la mano de su empresa Blue Origin y su socio Sierra Space, pretenden lanzar Orbital Reef, la estación espacial que jubilará a la ISS. Después de reventar un primer módulo LIFE de Sierra Space en enero, la NASA ha hecho estallar un segundo módulo, y lo ha recogido en vídeo.
Hablamos de uno de los elementos que conformarán la estación espacial financiada por la NASA: un hábitat en forma de estructura inflable llamado LIFE (Large Integrated Flexible Environment, por sus siglas en inglés). La estructura, que estaba construida con telas Vectran conformadas en una trama de canasta, ha sido sometida a una prueba de presión "de explosión máxima", causando que reventara.
Dicha prueba de alta capacidad se llevó a cabo en el Centro Marshall de Vuelos Espaciales de la NASA en Huntsville, Alabama. El hábitat inflable se conformó a partir de correas y telas de alta resistencia que, sometidas a una alta presión, forman una estructura sólida. El modelo medía más de 6 metros y tenía el tamaño de una casa, y pudo aguantar tremendamente bien el test de la agencia espacial.
El hábitat inflable de la NASA
El test pudo realizarse en junio, y los resultados han dejado muy satisfechos a los miembros de Sierra Space y Blue Origin. La estructura reventó (o falló, más bien) después de superar los niveles de seguridad x4 recomendados por la NASA en un 22%. El volumen de la estructura era de 300 metros cúbicos, un tercio del volumen de la ISS.
La presurización pudo alcanzar un pico de 74 psi, excediendo el factor de seguridad 4x de la NASA en un 22%. El nivel que recomienda la agencia espacial, por cierto, es de 60,8 psi, o lo que es lo mismo, una presión operativa máxima de 15,2 psi multiplicada por un factor de seguridad de 4. Así, Sierra Space pudo verificar la escalabilidad de sus estructuras que van desde los 10 hasta los 1.400 metros cúbicos "basadas en la arquitectura inflable actual de artículos blandos" de Sierra Space.
Por otro lado, Sierra Space incluyó hasta dos placas de cierre internas de 1,2 x 1,2 metros separadas de la estructura LIFE. Básicamente, integró un conjunto de estructuras metálicas dentro de la carcasa de la estructura con la intención de emular un componente de diseño, como por ejemplo, una ventana. El hecho de que este hábitat pudiera explotar a tan altas presiones dejó muy contentos a los responsables.
Esto es debido a que la alta presurización a la que se sometió el hábitat LIFE demostró no solo sus capacidades, sino que arrojó importantes datos críticos para respaldar las pautas de certificación de productos blandos inflables de la NASA. De hecho, demostrar la capacidad de este para cumplir con los factores de seguridad recomendados a través de estas pruebas de presión es "uno de los requisitos estructurales principales de un artículo de bienes blandos", dice la NASA.
Con este éxito bajo el brazo, Sierra Space se está preparando para realizar una primera prueba de su tecnología para estaciones espaciales de 500 metros cúbicos, que tendrá lugar el próximo año 2025. Beth Licavoli, gerente del programa de bienes blandos de Sierra Space, aseguró que esta segunda prueba de explosión "nos brindará el diseño, la repetibilidad y la arquitectura a medida que avanzamos hacia nuestra certificación de la cubierta de presión del hábitat LIFE.