A menos de una semana de su regreso a tierra, la nave Starliner ha vuelto a llamar la atención por un extraño suceso. La nave de Boeing tiene previsto regresar no antes de las 6:04 p.m. EDT (medianoche en España) del próximo viernes 6 de septiembre, según informó la semana pasada la NASA. Lo hará sin los dos astronautas que llevó a la Estación Espacial Internacional (ISS) en junio por una serie de problemas. Precisamente uno de ellos, ha informado de unos sonidos que procedían de la nave.
El astronauta estadounidense, Barry Wilmore, solicitó ayuda al equipo de tierra de la NASA el sábado 30 de agosto en relación a unos golpes repetitivos que se escuchaban dentro de la nave de Boeing. Un miembro del foro de vuelos espaciales de la NASA captaba esta curiosa petición y la compartía en internet.
En la grabación, que se puede escuchar en el siguiente video, Wilmore solicita a la Houston que configuren la llamada para poder mostrarles el sonido que se escucha en la Starliner. "Hay un ruido extraño que sale por el altavoz... No sé qué lo está provocando", dice Wilmore. El sonido que se puede escuchar es metálico y repetitivo con ligeras vibraciones.
Tanto el astronauta como el equipo de Tierra se mostraban tranquilos. "Lo haré una vez más y dejaré que todos ustedes se rasquen la cabeza y vean si pueden averiguar qué está pasando", respondió Wilmore. El origen del sonido puede tener una explicación muy simple como una comunicación con cierto retraso. La NASA no ha dado ningún tipo de explicación al respecto ni si el sonido ha cesado, aunque la comunidad de aficionados a la exploración espacial no ha tardado en proporcionar sus hipótesis.
Las teorías van de las más sencillas como un usuario en Reddit que explica que "si colocas un micrófono y un altavoz en lados opuestos de un almacén muy silencioso y luego transmites el audio con un retraso de 500 ms, terminaría sonando así". Hasta las más alocadas o humorísticas que anuncian la llegada de extraterrestres " alguien está llamando a la puerta", bromean. Hay que tener en cuenta que tanto las comunicaciones como las diferentes presiones a las que están sometidas las naves y la estación puede provocar ruidos de vez en cuando.
Tanto Wilmore, como la astronauta Sunita Williams, la tripulación de Starliner, regresarán el año que viene en la Crew Dragon de SpaceX que ha reservado dos asientos en su próxima misión de rotación para la ISS. Debían regresar en 10 días a tierra después de viajar a principios de junio, pero la Starliner sufrió algunas fugas de helio y cinco de sus 28 propulsores del sistema de control de reacción fallaron en el camino a la ISS.
La NASA ha preferido asegurarse que los astronautas vuelven sin riesgo. En principio, y si los sonidos o fugas de helio no lo impiden, la Starliner regresará vacía a final de esta semana en una maniobra que ya realizó en vuelos de prueba anteriores desacoplándose y reingresando en la atmósfera de forma autónoma y segura.