Estados Unidos desplegará en Israel su poderoso sistema antimisiles para reforzar la capacidad de respuesta ante posibles ataques de Irán. Esta protección se sumará a los sistemas para derribar proyectiles con los que cuenta el ejército de Netanyaju como la Cúpula de Hierro. Conocido como THAAD, es una de las armas de defensa más potentes del ejército estadounidense con alta tasa de éxito.
No es la primera vez que el THAAD sale del territorio estadounidense, este sistema ya se envió a Israel en 2019 para un ejercicio. Además, se han desplegado en Guam para proteger las bases militares en la isla del Pacífico ante las amenazas de Corea del Norte o China. Incluso en 2017 se desplegó en Corea del Sur contra los misiles de Corea del Norte y provocando fuertes protestas de China.
Producido por Lockheed Martin, el sistema de defensa THAAD es una de las armas antimisiles más poderosas del ejército estadounidense, capaz de interceptar misiles balísticos a distancias de 150 a 200 kilómetros. También sirve para disuadir de posibles ataques, siendo capaz de rastrear objetivos a distancias de hasta 3.000 km. Según las pruebas a las que ha sido sometido, el THAAS cuenta con una tasa de éxito casi total.
THAAD es la abreviatura de Terminal High-Altitude Área Defense y utiliza una combinación de radar e interceptores avanzados. Se trata del único sistema de defensa estadounidense que puede atacar y destruir misiles balísticos de corto, medio y alcance intermedio, tanto dentro como fuera de la atmósfera durante su fase terminal de vuelo.
Los interceptores THAAD son cinéticos, esto significa que elimina los misiles colisionando con ellos en vez de explotar cerca de la ojiva entrante. En total, este escudo se compone de siete baterías compuesta cada uno de seis lanzadores instalados en camiones. Cada camión cuenta con ocho interceptores cada uno. El conjunto se apoya en un potente sistema de radar y un control de tiro y comunicaciones.
El punto clave de este sistema es el radar de vigilancia transportable del ejército y la marina, o AN/TPY-2. Se puede desplegar con la batería de misiles o estar instalado en los buques de la Armada. Sea cual sea su ubicación, está diseñado para detectar misiles de dos formas diferentes: la más avanzada rastrea los objetivos a distancias de hasta 3.000 kilómetros. Irán está a unos 1.700 kilómetros de Israel. En segundo lugar, el modo terminal apunta hacia arriba para bloquear misiles durante su descenso, según el Proyecto de Defensa de Misiles.
Estados Unidos ha informado que enviará a Israel uno de esas baterías para reformar su capacidad de respuesta ante los misiles, "tras los ataques sin precedentes de Irán contra Israel el 13 de abril y el 1 de octubre", se puede leer en el comunicado emitido por el Pentágono este domingo 13 de octubre.
Para poner en marcha este sistema de defensa, será necesario el despliegue de tropas estadounidense sobre el terreno. El país americano enviará 100 soldados a Israel con la misión de operar esta batería.