Así es el caza Mirage, el avión de combate francés que usará Ucrania: aniquilan drones y bombardean territorio ruso
- Francia ha confirmado el primer envío de tres cazas Mirage 2000-5F, que en breve empezarán a sustituir a los vetustos bombarderos Su-24.
- Más información: Las primeras misiones de los cazas F-16 en Ucrania contra Rusia: de bloquear radares a derribar sus drones y misiles
Ucrania lleva desde el principio de la invasión rusa, en febrero 2022, intentando equilibrar el poderío aéreo de los de Vladímir Putin, muy superior tanto en número como en capacidades tecnológicas. Hasta hace poco dependientes de los Su-24 y los MiG 29, procedentes de la era soviética, los ucranianos recibieron en verano los primeros F-16 de EEUU, que ya han demostrado su eficacia a la hora de derribar drones y misiles. Ahora le llega el turno a los cazas Mirage 2000-5F, tras el acuerdo alcanzado por Emmanuel Macron y Volodímir Zelenski y cuya llegada a suelo ucraniano está prevista para el 20 de enero.
Se trata de un primer lote de entre tres aviones, de los diez previstos en total para sustituir la flota de bombarderos ucranianos Su-24, fabricados durante la década de los años 80 del siglo pasado. El acuerdo, filtrado por Avions Legendaires, llega después de largas negociaciones entre ambos presidentes, y se suma a otras cesiones francesas, como los vehículos blindados AMX-10RC o los obuses autopropulsados Caesar.
Además de su maniobrabilidad y versatilidad, uno de los aspectos más importantes que aportan los Mirage a las Fuerzas Aéreas de Ucrania es la facilidad para entrenar a sus pilotos. Además, aunque no son cazas de reciente fabricación, sí han sido modernizados por la Dirección General de Armamento (DGA) francesa con capacidades avanzadas. Eso les permitirá utilizar, entre otras municiones, misiles de crucero SCALP-EG y Storm Shadow, que ya han marcado un antes y un después en el conflicto ampliando el rango de acción de Ucrania en terreno ruso.
Mirage franceses
Los Mirage que Francia enviará a Ucrania pertenecen al modelo 2000-5F, un tipo muy específico que se basa en la reconversión de las aeronaves más antiguas que entraron en servicio hace dos décadas y que cuentan con algunas particularidades respecto a las versiones de exportación.
Los fabricantes de aviones militares suelen crear una versión nacional para proporcionar capacidades extra al país de origen y otra algo menos equipada para que sea el cliente de origen quien elija los sistemas a integrar. Los Mirage franceses cuentan en la actualidad con algunos sistemas de contramedidas defensivas especiales, según recoge The War Zone.
Estos mismos cazas que en unas semanas pasarán a manos ucranianas también disponen del radar RDY. Se trata de un sistema esencial que mejora las capacidades de detección de amenazas respecto a los otros modelos de radares que los Mirage 2000 suelen equipar. Por ejemplo, la capacidad de monitorizar más de un objetivo de forma simultánea y una mejora en la funcionalidad de detección aire-superficie.
Si Francia decide mantener el equipo ya instalado en sus cazas puede suponer un impulso importante en las capacidades aéreas de Ucrania. Principalmente contra aquellas amenazas representadas por drones o misiles de crucero de vuelo bajo, con las que Rusia amedrenta a su país vecino prácticamente a diario.
Otro aspecto que queda por revelarse es el armamento que irá asociado al caza. Los Mirage 2000-5F de Francia disponen actualmente del misil aire-aire MICA que se alinea con la gran capacidad de la aeronave para llevar a cabo misiones de patrulla y guerra en el aire. Sin embargo, también lleva algunas armas diseñadas para ejecutar misiones a la superficie como el misil de crucero SCALP-EG o la bomba guiada Hammer.
Una de las misiones encomendadas a estos Mirage en Francia es la de permanecer alerta para defender el espacio aéreo de dominio nacional, situándolos en la primera línea operativa del país galo. Se espera una reducción de la flota paulatina de este modelo de caza para ir sustituyéndolos por los Rafale de nueva factura y más modernos.
Un as en la manga
La plataforma de los Mirage data de los años 70 del siglo pasado, cuando fueron diseñados. A partir de ese momento, y dado el éxito que había cosechado en exportaciones, Francia decidió continuar con el desarrollo de varias versiones que se han ido enlazando hasta la 2000-9 que actualmente se encuentra operativa en Emiratos Árabes Unidos y que dentro de unos años irá a parar a Marruecos.
El caza mide 14,36 metros de largo, tiene una envergadura de 9,13 metros y un peso máximo al despegue de 17.000 kilogramos. La planta motriz está representada por un único motor firmado por la también francesa Safran Aircraft Engines (anteriormente conocida como Snecma) que le confiere a la aeronave una velocidad máxima operativa de 2.300 km/h.
Dispone de un total de 9 puntos de anclaje —4 pilones subalares y 5 soportes bajo el fuselaje— donde puede integrar todo tipo de accesorios y armamento. Dentro de esta última categoría, además de un par de cañones y los sistemas antes mencionados, es compatible con misiles aire-aire como el MBDA Meteor o el aire-superficie Storm Shadow.
Una de las diferencias más notables y positivas que aporta el caza francés a la ecuación aérea ucraniana tiene que ver con la formación. Macron anunció hace meses la capacidad para entrenar a los pilotos que manejarán el Mirage, mientras que el asunto académico con los F-16 ha supuesto más de un quebradero de cabeza.
Así, los Mirage 2000-5F se convertirán en los primeros aviones de combate diseñados y fabricados en Europa transferidos a Ucrania, adelantándose a los Gripen suecos, que también estaban (y siguen estando) encima de la mesa. Los países de la OTAN intentan así reforzar y diversificar las capacidades de las Fuerzas Aéreas de Ucrania en su lucha desigual contra el nutrido arsenal de aeronaves ruso.