Este martes 25 de febrero, Jesus Calleja se convertirá en el tercer español en traspasar la estratosfera y convertirse en astronauta por unos minutos. Será a bordo del cohete New Shepard de la compañía de Jeff Bezos, Blue Origin. Su viaje, junto a otros cinco privilegiados se podrá seguir en directo.
El próximo martes, 25 de febrero, a las 16:30 hora de España peninsular, los seis pasajeros de la misión NS-30 se elevarán hacia el espacio en el cohete New Shepard, para vivir una experiencia de la que ya han disfrutado antes personalidades muy conocidas. Desde el fundador, Jef Bezos, hasta actores como William Shatner, el mítico Capitán Kirk en Star Trek, o la divulgadora científica Emily Calandrelli, han pasado ya por este programa.
Esta vez, el logo de la misión ha sido diseñado principalmente por el aventurero español. Alpinista y piloto, el icono muestra una montaña y nubes, así como una paloma con una rama de olivo que representa la esperanza de Calleja y Lane Bess de paz para todos, según ha explicado la empresa.
Calleja ha recordado que durante el viaje se somete a un exhaustivo estudio a los pasajeros. La monitorización de las constantes vitales sirve para distintos proyectos de investigación sobre el impacto que tienen estos viajes en el cuerpo humano.
El cohete y la cápsula
El cohete New Shepard, nombrado así por el astronauta Alan Shepard (primer estadounidense en el espacio) se compone de dos fases: propulsor y cápsula. Se trata de un vehículo totalmente autónomo, que no requiere de pilotos, un cohete suborbital totalmente reutilizable. El conjunto tiene una altura de 18 metros.
La primera etapa es el propulsor, el encargado de impulsar a los seis pasajeros al espacio. Esto se consigue con un Motor Be-3PM, un motor de cohete bipropelente fabricado por Blue Origin que quema hidrógeno líquido y oxígeno líquido. Este también es el encargado de mantener el control en el viaje de regreso a 9,7 km/h. Esta parte de la nave cuenta con aletas y frenos de arrastre para suavizar la vuelta a Tierra, además del tren de aterrizaje que le mantiene de pie sobre el suelo.
La cápsula está presurizada y tiene espacio para seis personas. Cada asiendo está al lado de un gran ventanal para ofrecer una vista que pocos humanos han visto en persona.
El recorrido
La fase de ascenso tiene una duración aproximada de 3 minutos en los que se alcanza una velocidad superior a los 3.700 kilómetros por hora (más de 3 veces la velocidad del sonido). El apogeo de este viaje (el punto de mayor altura) es a 107 kilómetros en el minuto 4.
De izq a drch: Richard Scott, Jesús Calleja, Elaine Chia, Lane Bess, Tushar Shah
Por el momento, la compañía de Jeff Bezos es la única que consigue atravesar la Línea Kármán que certifica como astronautas a sus viajeros; hasta ahora, son 47 personas las que han cruzado esta franja con este programa espacial. Aunque la atmósfera no termina abruptamente a una altura determinada, sino que se hace cada vez más tenue con la altitud, la línea Kármán, se ha establecido como la frontera oficial entre la atmósfera y el espacio exterior y se encuentra a una altura de 100 km sobre el nivel del mar.
Los siguientes minutos son para regocijo de los pasajeros. La cápsula emprende su propio viaje separándose del sistema de lanzamiento. En este punto, la tripulación empieza a experimentar cierta ingravidez y pueden flotar libremente por la cápsula para observar la curvatura de la Tierra a través de los grandes ventanales con los que está equipada New Shepard.
New Shepard aterrizando
Mientras esto ocurre en el espacio, el propulsor regresa a tierra. Como ya se ha indicado antes, este sistema es reutilizable, por lo que la primera etapa de la nave realiza una reentrada controlada sobre el minuto 4 y aterriza en una plataforma similar a un helipuerto en mitad del desierto.
Aproximadamente en el minuto 6 de vuelo, la cápsula comienza a descender de forma controlada. Primero en caída libre y después frenada por el sistema de paracaídas que se despliega en el descenso. La New Shepard toca tierra aproximadamente cuando han pasado 10 minutos del despegue, trayendo de vuelta sanos y salvos a los tripulantes y culminando esta experiencia solo al alcance de unos pocos afortunados.