Esta consola-ordenador ha sido creada en España y permite jugar a títulos actuales
Un nuevo proyecto de Kickstarter venido de Palma de Mallorca es una consola portátil en base a un ordenador, que permite jugar a títulos actuales.
18 noviembre, 2016 19:12Noticias relacionadas
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El proyecto Smach Z, proveniente de Palma de Mallorca, pretende crear una consola portátil en base a un ordenador.
Vale, no es una idea nueva; ya hemos visto muchos proyectos que quieren unir las consolas portátiles con la potencia de los ordenadores.
Pero parece que, esta vez sí, puede hacerse realidad. Lo digo por dos razones.
La dificultad de crear una consola portátil en base a un ordenador
Porque su campaña de Kickstarter está a punto de alcanzar el doble de lo necesario; y porque la transparencia con la que está presentado el proyecto es optimista.
El problema que suelen tener este tipo de proyectos que buscan hacer lo mismo que las consolas portátiles está en la potencia del hardware.
La inmensa mayoría de las consolas portátiles no destaca por su potencia; para conseguir una buena tasa de frames dependen de la optimización, tanto del sistema como de los juegos.
Los juegos de ordenador nunca estarán tan optimizados, y por eso conseguir tasas de frames aceptables depende del hardware. Afortunadamente, los últimos desarrollos han dado lugar a SoCs y procesadores móviles muy capaces.
El secreto del Smach Z está en su gráfica integrada
El Smach Z lleva en su interior la opción de AMD, el Merlin Falcon RX-421, con cuatro núcleos a 2,1 GHz.
Comprensible, ya que eso nos permite usar la gráfica integrada Radeon R7 a 800 Mhz; está a un nivel superior a las alternativas de Intel.
El Smach Z tendrá dos versiones con algunas diferencias de hardware.
- Memoria -> 4 GB de RAM en versión básica, 8 GB en la Pro.
- Almacenamiento -> 64 GB en básica, 128 GB en la Pro.
- Cámara -> Sin cámara en básica, cámara frontal en la Pro.
- Conectividad -> Wifi en la básica, Wifi y 4G en la Pro.
Entre la instalación de Windows 10 y el tamaño de los juegos actuales, no te quedará mucho espacio en la versión básica.
Los controles son curiosos. Tenemos la típica selección de botones y gatillos; pero además podemos usar dos touchpads hápticos para juegos como shooters en primera persona. Podemos intercambiarlos por botones normales como queramos.
Un rendimiento demasiado justito para la pantalla que tiene
Pero tal vez la parte que menos me gusta es la pantalla táctil de seis pulgadas de resolución 1080p. Yo habría elegido una pantalla de resolución 720p para contener los gastos, por una sencilla razón.
Porque según las pruebas de sus propios creadores, el Smach Z es un ordenador capaz de ejecutar muchos juegos actuales a unos 30 frames por segundo. No es lo ideal, pero 30 fps es jugable.
Sin embargo, estas cifras sólo se consiguen si bajamos la resolución a 720p; sólo en juegos concretos como Torchlight 2 se puede subir la resolución a 1080p y mantener una tasa jugable.
En cuanto al sistema operativo, podemos elegir entre Windows 10 o una versión de Linux llamada Smach OS; tiene una interfaz propia, adaptada a la pantalla, y de hecho es el sistema recomendado por sus creadores.
Una consola para jugar, si puedes hacer sacrificios
Con cinco horas de batería, y lo suficientemente potente como para ejecutar juegos como DOTA, Overwatch o Civ V; el Smach Z se presenta como una buena alternativa para jugar en cualquier sitio.
Quedan dudas, por supuesto, pero ya pueden presumir mucho más que otros proyectos.
En el momento de escribir estas líneas ya es seguro que el Smach Z será financiado; tenemos 24 horas para conseguir un Smach Z por 299 € (aún quedan unidades early bird por 279 €), mientras que un Smach Z Pro por 469 €.