Con este programa podremos controlar varios ordenadores con un mismo periférico.

¿Quién querría controlar varios ordenadores al mismo tiempo con un único teclado y ratón? Parece algo muy estúpido, pero controlar varios ordenadores al mismo tiempo es más común de lo que piensas. Lo peor de todo es que pocos son los ratones compatibles con esto (sí, porque los hay).

No obstante, podemos encontrar algunos programas para Windows y macOS que son capaces de hacer esto con cualquier ratón o teclado que tengamos en casa. Lo mejor es que podemos hacerlo incluso mezclando los dos sistemas operativos: ambos no tiene por qué ser Windows o Mac.

Esto es ideal, por ejemplo, para la gente que trabaja con un Mac y con un Windows por temas de compatibilidad con el software que usan. De este modo no tendremos que recurrir a más un periférico (quién lo haya hecho sabrá que es muy incómodo), así como tampoco tendremos que gastarnos más de 100 euros (que es lo que cuesta como mínimo un ratón de este tipo) o porqué cambiarlo.

Sincronizar un ratón y teclado con varios ordenadores

Share Mouse, que es como se llama uno de estos programas que lo hacen posible, permite además arrastrar de un lado a otro archivos. Incluso también se puede compartir el portapapeles. Es, básicamente, como si estuviésemos en un ordenador con varias pantallas.

El raton funciona siempre en el ordenador activo

No es magia ni brujería: lo que hace es que cuando detecta que ha llegado a un extremos de la pantalla, pasa el legado al que sigue (el orden lo elegimos nosotros). Por supuesto para poder hacer esto realidad tendremos que tener los ordenadores en una misma red local.

share-mouse-compartir-raton-dos-ordenadores

El programa, que es gratuito si seleccionamos que es para uso personal, está disponible en inglés, aunque no supone problema. Lo único que necesitaremos es la Dirección IPv4 (se consigue en el Símbolo del Sistema con el comando ‘ipconfig’).

Es recomendable tener un ratón conectado en cada ordenador para que no desaparezca el puntero

Como podremos apreciar una vez abramos el programa (está ejecutándose siempre en segundo plano), podremos cambiar la distribución de las pantallas disponibles. Esto es, colocarlas a nuestro gusto. El ordenador local, el que tiene los periféricos conectados, es el que tiene el marco más grueso.

También podemos establecer una contraseña en caso de que hayan varias personas conectadas a la red (para evitar que alguien que no seamos nosotros pueda controlar nuestro ordenador). Esto es especialmente interesante cuando estemos en una red pública o cuando sabemos que pueden estar ‘robándonos’ Internet.