Lian Li ha presentado unos cables para fuente con iluminación RGB; probablemente una de las modificaciones más absurdas que puedes hacer a tu PC.

La iluminación RGB es el siguiente paso en la personalización de nuestros ordenadores; ya no basta con luces de colores, tenemos que meter todo un arcoíris en la caja.

La obsesión ha llegado a extremos cómicos, con todo tipo de accesorios y componentes con iluminación integrada; desde ratones, teclados, ventiladores, fuentes de alimentación, memoria RAM, placas base… Cabe preguntarse dónde está el límite; y posiblemente Lian Li haya llegado a él, con su última novedad.

Llegan los cables para fuente con iluminación RGB

Se trata nada menos que de unos cables para fuente con iluminación RGB integrada; en concreto, son los cables de 24 pines que ya se usan en la mayoría de las placas base modernas, y que son la principal fuente de energía del sistema.

¿No te ha molestado siempre que los cables de la fuente sean aburridos, de color negro? Pues entonces aquí tienes la solución, una idea tan absurda que ya está circulando por redes sociales como si fuera una broma.

Pero no lo es, el Lian Li Strimer RGB Cable es un producto real, desarrollado en colaboración con Der8auer, un famoso “overclocker” y “modder”; es el primer cable de este tipo en el mercado, pero algo nos dice que no será el último.

Además de los 24 pines, el cable cuenta con una salida de tres pines que podemos conectar en la placa base; de esa manera, podemos configurar la iluminación a nuestro gusto desde el sistema.

El controlador PCIe incluido permite activar diez tipos de efectos de iluminación posibles pulsando un botón, para llamar lo máximo la atención; o simplemente podemos configurarlo con nuestros colores favoritos, o sincronizarlo con otros componentes RGB del sistema.

Los cables en sí están envueltos por una malla blanca, para reforzar los colores, y son completamente funcionales, como cualquier otro.

El Lian Li Strimer RGB Cable por el momento sólo está disponible en Overclockers UK, por 35,99 libras (40,50 €); un coste importante teniendo en cuenta que cualquier fuente que compres ya viene con cables perfectamente válidos. Así que es sólo recomendable si el RGB es tu vida o si tienes un PC en mente que apuesta por el RGB.