La tecnología lleva gustándome desde que tengo uso de razón. las videoconsolas, los relojes, los televisores, cualquier cosa con botones. Y más tarde, cualquier cosa con botones o pantalla táctil.

Desde que me aficioné a la tecnología móvil he visto pocas novedades que hayan sido capaz de alcanzar una importancia mediática similar a la de los altavoces conectados. Los smartphones, smartwatches y tablets. Y ya.

Y creo que, con la salvedad de los teléfonos inteligentes, los altavoces están logrando una penetración en nuestro día a día que no han logrado, o mejor dicho, mantenido, otros productos. Es aún un sector joven, pero con el potencial que siempre le he visto a la domótica y que no ha cuajado entre el consumidor medio.

Amazon es uno de los grandes

Al contrario que en los smartphones, al auge de los altavoces inteligentes Amazon ha sabido llegar a tiempo. Esto lo hizo con sus Amazon Echo, dispositivos que han evolucionado de diversas formas, siendo una de ellas los Echo Show, altavoces con pantalla.

Esto podría ser contradictorio ya que normalmente la pantalla la asociamos a algo que miramos más tiempo, como un televisor o un teléfono.

Pese a eso me he dado cuenta de que tener una pequeña pantalla en la mesita de noche o en la cocina es más útil de lo que parece.

Pequeño y con los botones adecuados

El Echo Show recuerda a las tablets antiguas, con grandes marcos y una pantalla de tamaño contenido, en este caso de 5.5 pulgadas. La trasera se pronuncia en forma de prisma y hace que el dispositivo quede apoyado con la pantalla ligeramente inclinada hacia arriba.

En la parte superior tenemos un botón que oculta la cámara, por si no queremos que esté abierta. También uno que la apaga a la vez que silencia el micrófono. Por último, dos botones de volumen por si no queremos cambiarlo con órdenes de voz.

En la zona trasera está el conector de carga, el jack de audio de 3.5 mm para conectar un dispositivo de salida y un puerto microUSB por si queremos usarlo con este tipo de cargador. Pero no, no tiene batería y no se puede usar de forma inalámbrica.

Repuestas visuales y pantalla táctil

Una de las mayores diferencias entre tener un altavoz con pantalla o sin ella es que puedes pedirle que te muestre resultados en imágenes, como las fotos de algo concreto, o ayuda visual cuando estás cocinando una receta.

Además, el tener una pantalla táctil habilita una nueva forma de interacción que hace más rápido ejecutar algunos comandos. Se incluye un control de brillo que hace que la pantalla cambie el mismo en función de la hora del día, aunque podemos cambiarlo de forma manual si hace falta.

La interfaz del sistema del Echo Show usa una pantalla principal, una cortina de notificaciones con la gestión del brillo, algunos accesos directos y la reproducción de música y una sección lateral con mas opciones, como el control inteligente o la música.

Podemos poner series, vídeos musicales o graciosos, pero siempre bajo el ecosistema de Amazon (con Prime Video o Prime Music) y apoyado en el de Microsoft para cosas como las búsquedas, que se realizan con Bing. Eso si, dada la diagonal de la pantalla, de 5.5 pulgadas, y la resolución, 960 x 480 px, no podemos decir que sea ideal usarla para ver mucho tiempo una serie o película, pero puede servir para ponerla de fondo y que un niño se quede dormido.

También sirve la pantalla para despertarnos sin sonido, aumentando el brillo de forma paulatina, y para navegar usando Silk, el navegador web de Amazon.

Buen alcance de micrófono y buen sonido

Pero un altavoz inteligente lo es porque permite que le demos órdenes de voz y podemos usar el dispositivo como altavoz para usar servicios de streaming y también como altavoz bluetooth o como sistema auxiliar usando un conector jack de entrada, no de salida.

El sonido es potente y limpio, más de lo que me esperaba, y me ha parecido más similar al Amazon Echo que al Echo Dot.

Aunque no llega al nivel de excelencia de otros altavoces e capaz de llenar una habitación de tamaño medio, aunque está pensado para ser usado en un dormitorio o en la cocina, como hemos dicho.

Controlando la casa

Un aspecto que me resulta de importancia en los altavoces inteligentes es que puedan interactuar con los aparatos de mi casa, controladores para la tele, el aire acondicionado o la aspiradora.

También he usado el Echo Show 5 para apagar y encender las luces, y lo ha hecho como el resto de aparatos con Alexa que uso, de forma rápida y efectiva.

Una cámara a la que no le he sacado partido

He de reconocer que el hecho de tener una cámara en el altavoz no ha logrado serme útil. Seguro que es por mi forma de vida y mi uso ya que entiendo que sea relevante para familias numerosas, personas que usan mucho las videollamadas, etc.

Además de para una videollamada podemos usar la cámara para ordenarle a Alexa que saque una foto y directamente la subirá a nuestra cuenta de Amazon Photos.

También podemos usar el Echo Show para controlar las cámaras de seguridad que tenemos en la casa ya que al tener pantalla podemos ver el contenido que nos muestran.

Una opción muy válida para pequeñas estancias

Hasta ahora no había probado un altavoz con pantalla y me ha resultado muy cómodo. Al igual que me pasa con la Xiaomi Mi Band 3, el poder ver la hora con un vistazo, tener las citas del calendario a golpe de vista o poder seguir las letras de las canciones mientras las escucho me ha gustado.

No es un aparato potente pero no se nota salvo en ocasiones puntuales como el abrir una película, pero ahí se agradece la opción de conectarnos a redes Wifi de 5 Ghz.

No es un producto especialmente barato pero tampoco me parece que tenga un precio excesivo. Sus 85 euros son muy acertados y personalmente lo veo más atractivo que un Echo normal que tiene quizás mejor sonido pero carece de pantalla. También me parece mejor que el Echo Spot que cuesta algo más incluso y sólo recomendaría el Echo Dot si el coste es muy relevante.