Una de las grandes injusticias del mercado de ordenadores en España es que Samsung ya no tenga presencia; especialmente porque este 2019 ha sido precisamente el año en el que la compañía ha decidido revolucionar su gama.
Todo empezó con el Galaxy Book S, un portátil que presume de nada menos que 23 horas de batería, pero eso era sólo el principio. Ahora el fabricante surcoreano ha presentado los nuevos Galaxy Book Flex y Galaxy Book Ion.
Estos nuevos modelos representan la nueva generación de portátiles de uso general de Samsung, y por lo tanto sustituyen a los Notebook 9. Adoptan las nuevas líneas de diseño de Samsung e introducen algunas novedades que nos gustaría ver en otros dispositivos.
Los portátiles de Samsung tienen una funcionalidad única
Por ejemplo, estos son los primeros portátiles de Samsung que usan pantallas QLED; en efecto, usan la misma tecnología que Samsung tiene en sus televisores de gama alta. Esto debería diferenciarlos enormemente respecto a otros fabricantes en lo que respecta a la calidad de imagen.
En concreto, el salto a QLED ha traído consigo un mayor brillo, de hasta 600 nits, superior a lo que solemos ver en el sector. Pero donde tal vez notaremos la diferencia a primera vista es en el tratamiento de color, que promete ser más real.
Pero esta es una novedad que, probablemente, llegue con otros fabricantes; al fin y al cabo, Samsung también es uno de los principales suministradores, y apostamos a que veremos portátiles QLED el año que viene.
La novedad que realmente nos ha llamado la atención, y que deberían copiar otros fabricantes, es el cargador inalámbrico integrado en el touchpad. Por lo tanto, podemos poner nuestro dispositivo encima de la zona que normalmente usamos para controlar el ratón, y empezará a cargarse por si solo.
No es una funcionalidad que esté siempre activa: tenemos que encenderla usando una combinación de teclas. Y es que, evidentemente con el cargador inalámbrico activo no podemos usar el touchpad, y tendremos que conectar un ratón. Pero la verdad es que muchos ya hacemos eso porque no soportamos usar un touchpad o trackpad durante mucho tiempo.
Para mucha gente, el touchpad es espacio inútil, así que es inteligente que se pueda usar para otros propósitos, especialmente si es para ganar algo de batería en otro dispositivo. No está claro si podríamos poner un smartphone en una superficie tan pequeña, pero es seguro que sirve para nuestro smartwatch o auriculares inalámbricos.
Esta funcionalidad puede tener incluso más sentido si la juntamos con la posibilidad de conectar nuestro smartphone al ordenador, permitiéndonos usarlo como trackpad. Es decir, que podríamos poner el móvil encima del touchpad para que se cargue, y usar su pantalla táctil para seguir controlando el cursor. Aunque Samsung no ha especificado que esto sea posible, puede ser una buena idea.
Por lo demás, los nuevos Galaxy Book tienen el último hardware, como podríamos esperar; ambos cuentan con los últimos procesadores de décima generación Intel Core, pero no servirán para jugar sólo con una GeForce MX250.
El Galaxy Flex es un dos en uno, por lo que tiene una bisagra que nos permite convertir el portátil en una tablet con lápiz táctil incluido. El Galaxy Ion por su parte es un portátil convencional. Ambos estarán disponibles en diciembre en algunos mercados, pero por el momento no hay noticias de su lanzamiento en España; tal vez es el momento de que los portátiles de Samsung vuelvan a nuestro país.