Que los altavoces inteligentes han dominado el año es innegable; aunque no se trata de un tipo de dispositivo nuevo precisamente, es ahora que realmente podemos decir que hayan conquistado nuestro hogar.
La clave está en la variedad de dispositivos disponibles; aunque los llamamos "altavoces inteligentes", para algunos de estos productos ni siquiera es su función principal. Es el caso de asistentes con pantalla como el Portal de Facebook, o la tablet Yoga Smart Tab, que puede convertirse en un asistente.
La propia Lenovo ahora nos presenta otro dispositivo basado en la misma idea, pero adaptada a un entorno diferente a los salones y cocinas que normalmente son territorio de los altavoces inteligentes: nuestro dormitorio.
Lenovo Smart Clock, un despertador inteligente
Porque como su nombre indica, el Lenovo Smart Clock es un reloj inteligente, más concretamente un despertador. De entrada, eso ya implica muchas cosas, empezando con que no es simplemente un altavoz, sino que también tiene una pantalla.
El segundo detalle que lo define como reloj despertador es su tamaño. Este es uno de los altavoces con pantalla más pequeños que puedes conseguir, con una pantalla de apenas 4 pulgadas; probablemente tengas un móvil con una pantalla más grande.
Por supuesto, de eso se trata; está más pensado para la mesita de noche que para la mesa del comedor, y en ese sentido hay que decir que tiene el tamaño perfecto para no molestar junto con el resto de cosas que tendrás en la mesilla.
El dispositivo en sí tiene un diseño curioso; en vez de tener simplemente una cubierta de plástico que atraiga el polvo, está recubierto de un tela que evita ese problema y facilita la limpieza.
En la parte superior tenemos dos botones, para bajar y subir el volumen, pero por lo demás es un diseño simple. Sólo si miramos en la parte trasera encontraremos más cosas: el conector de electricidad, el botón para desactivar el micrófono, y un puerto USB-A.
Una pantalla que cumple su propósito
Teniendo en cuenta el tamaño, mi principal preocupación al conectar el Smart Clock fue, por lo tanto, que la pantalla no iba a ser lo suficientemente buena; pero la verdad es que fueron miedos infundados.
La resolución de 480 x 800 píxeles es más que suficiente teniendo en cuenta el tamaño, pero especialmente lo es gracias a que la interfaz está basada en mostrar caracteres muy grandes sobre fondos de alto contraste. Gracias a esto, la legibilidad es muy buena, y con un vistazo podemos ver claramente la hora que es.
Al estar basada en tecnología IPS, los colores son vivos y las imágenes son nítidas. Esto es especialmente notable cuando configuramos el dispositivo para que funcione como un marco de fotos digital; aunque es cierto que con cuatro pulgadas no podrás presumir de tus creaciones, es convincente.
Los ángulos de visión son buenos, aunque tal vez me los esperaba mejores. Puedo leer la información de la pantalla desde cualquier ángulo, pero en ángulos extremos los colores se amarillean demasiado.
Más importante en un dispositivo de estas características es el brillo; y es que no lo usamos sólo de noche, sino también a lo largo del día. El contraste y el brillo son lo suficientemente buenos como para usar el dispositivo con iluminación natural.
Por supuesto, el brillo de la pantala varía dependiendo de la iluminación de cada momento; y en situaciones de bajo brillo, por defecto se muestra una esfera monocromática que no molesta.
Muy fácil de usar
La pantalla también es táctil, lo que nos permite usar la interfaz directamente con el dedo, y configurarlo a nuestro gusto. Por defecto, se mostrará el reloj con números blancos sobre fondo negro; pero también podemos optar por otra pantalla con información meteorológica añadida.
Siempre podemos cambiar entre diferentes "esferas"; tiene una buena variedad, desde las más simples a las de estilo "retro", pasando por las más extrañas. Aunque las que mejor aprovechan la pantalla son la de "Imagen Destacada", que obtiene una foto profesional de Internet, y "Google Fotos", que nos permite usar nuestras propias imágenes.
Si deslizamos hacia arriba desde la parte inferior de la pantalla podemos acceder a funciones básicas, como el brillo o el volumen, además de un modo de "No Molestar"; la última opción es el acceso a la configuración, aunque aquí la cantidad de opciones disponibles también es muy reducida. De hecho, lo más "complicado", por así decirlo, es que es necesario instalar la app de Google Home en nuestro smartphone para la configuración inicial.
Y es que realmente no necesitamos mucho más. Este es un dispositivo simple por diseño, y además, una vez que lo configures a tu gusto no tendrás que volver a tocar la pantalla.
Google Assistant, en un formato más pequeño
Y es que no podemos olvidar que estamos ante un dispositivo basado en el Asistente de Google, y por lo tanto la idea es que lo podamos hacer todo sólo con la voz.
Con el Smart Clock, tenemos acceso a la experiencia completa del Asistente de Google, y en ese sentido no se diferencia de otros altavoces inteligentes; es igual de capaz y funcional.
Por supuesto, dado que este es un reloj, las funciones relacionadas con las que más usaremos; poner nuevas alarmas es realmente sencillo, así como acceder al resto de funciones del dispositivo.
Por ejemplo, podemos convertir al Smart Clock en un reproductor multimedia; en ese caso abrirá una nueva página en la interfaz dedicada a esto. Si pedimos a Google que reproduzca un disco, mostrará la portada, pero también podemos hacer que muestre los controles. Si queremos que muestre el reloj, se mostrará la canción que está reproduciéndose en la parte inferior.
Es aquí que el Smart Clock realmente me sorprendió, ya que el altavoz de 3 W integrado (con potencia máxima de 6W) realmente suena bien teniendo en cuenta su tamaño. No sustituirá a un altavoz más grande, pero es perfectamente capaz de llenar de sonido una habitación normal, y con buena calidad de sonido.
Algo más que un despertador normal
Tal vez el principal motivo para comprarse (o regalar) un Smart Clock es el acceso a ese tipo de ventajas, que son imposibles en un despertador normal.
Por ejemplo, los despertadores con radio integrada son muy habituales, y podemos configurarlo para que se conecten con nuestra emisora favorita al despertarnos; por ejemplo para escuchar las noticias.
El Smart Clock, en cambio, usa el potencial del Asistente de Google para darnos los buenos días con toda la información que podamos necesitar. El parte meteorológico nos permitirá hacernos una idea de qué ropa nos tenemos que poner, el informe del tráfico nos indicará si tenemos que salir antes, y un resumen de las noticias nos pone al día; este contenido está personalizado al dedillo, dependiendo de nuestra localización y nuestros intereses.
Otra funcionalidad muy interesante es "Despertador Amanecer", que sube la luz del dispositivo poco a poco, durante los 30 minutos antes de que suene la alarma. Gracias a eso, podemos despertarnos de manera más natural que con un ruido o canción. Es una de esas opciones que tienes que probar al menos una vez, porque puede que te cambie tu rutina mañanera.
Pertenecer a la plataforma Google Home también tiene sus ventajas; un buen ejemplo lo tenemos en la integración con otros dispositivos, como cámaras con las que podemos conectar en directo.
Más útil de lo que parece
Es un dispositivo más útil si ya usas el Asistente de Google, por supuesto; pero también puede ser una buena excusa para empezar a usarlo. Sin embargo, se queda corto para explotar todas las posibilidades de la plataforma; por ejemplo, no tiene webcam, algo que normalmente no necesitamos (ni queremos) en un despertador pero supone que no podemos hacer llamadas con él.
El Lenovo Smart Clock es de esos dispositivos que ignoras hasta que puedes probar uno y de das cuenta de las posibilidades que ofrece. Sin embargo, en ningún caso estamos hablando de algo revolucionario; simplemente de una ayuda para nuestro día a día.
El Lenovo Smart Clock está disponible por unos 89,99 € en tiendas como PcComponentes.