Ya está aquí el verano y con él llegan las altas temperaturas que tantas ganas despiertan de pasarse el día en la piscina o en la playa. Sitios en los que, precisamente, dispositivos como los móviles corren el peligro de estropearse.
Por ese motivo es recomendable tener en cuenta el nivel de resistencia al agua que tiene un smartphone antes de dar el paso de comprarlo. Algo que podremos saber fácilmente buscando cuál es su certificación IP, un estándar creado por la Comisión Electrónica Internacional para calificar el nivel de protección de dispositivos frente a la entrada de elementos como el agua o el polvo.
El estándar IP está compuesto por dos dígitos. El primero, que va del 0 al 6, indica la resistencia al polvo; mientras que el segundo, del 0 al 9, indica la protección contra el agua. De este modo, un dispositivo con IP 67 será resistente a las salpicaduras, pero no a las inmersiones; en cambio, uno con IP68 sí podrá sumergirse.
Como es lógico, ir viendo uno por uno la resistencia de cada teléfono es una tarea bastante pesada, razón por la que desde Rastreator han querido hacer una recopilación de los mejores móviles sumergibles.
iPhone 11 Pro y Samsung Galaxy S20+
Comenzamos con los populares iPhone 11 Pro y Samsung Galaxy S20+. Ambos cuentan con certificación IP68, por lo que son capaces de soportar inmersiones de hasta cuatro metros durante períodos de hasta 30 minutos.
Dicha resistencia suele ser más que suficiente para un uso doméstico o caídas accidentales al agua que no deberían suponer más que un susto en el caso de tener uno de estos dos teléfonos. Asimismo, son resistentes al polvo.
Google Pixel 4 y LG G8
Otro ejemplo de resistencia es el Google Pixel 4, ya que dispone de protección contra el polvo y es sumergible hasta 1,5 metros de profundidad gracias a su certificación IP68.
Pasa lo mismo con el LG G8. De igual manera posee la certificación IP68, así que aguanta sin problemas las inmersiones de 1,5 metros durante media hora.
Cat S54 y Blackview BV9800 Pro
Hasta ahora hemos hablado de smartphones normales y corrientes, sin embargo, hay terminales diseñados especialmente para ser más resistentes en todos los sentidos, los rugerizados. Éstos son perfectos para trabajos o sectores en los que puedan darse accidentes.
Un ejemplo perfecto es el CAT S52, móvil que tuvimos la ocasión de probar hace unos meses. Según la firma es capaz de aguantar totalmente sumergido en el agua hasta 1,5 metros durante 35 minutos. Del mismo modo, resiste caídas sobre acero hasta 30 veces seguidas desde 1,5 metros de altura.
Otro ejemplo es el Blackview 9800 Pro, con certificación IP68 e IP68K de grado militar, resistente a caídas sobre hormigón y sumergible durante 30 minutos en todo tipo de agua, incluso si es salada.
Ulefone Armor 7 y Cubot Quest
Seguimos la recopilación con otras dos compañías centradas en teléfonos extremadamente resistentes, como Ulefone y Cubot. En este caso con sus modelos Ulefone Armor 7 y Cubot Quest.
Ambos disponen de la certificación IP68, por lo que aguantan sin problemas inmersiones de hasta 1,5 metros durante 30 minutos en todo tipo de agua. Eso sin olvidar que resultan de gran utilidad en deportes de montaña y aventura, pues tienen una resistencia a los golpes mucho más grande que cualquier teléfono normal.
Esperamos que esta pequeña guía os haya servido para tener un mayor conocimiento sobre los tipos de resistencia en los smartphones. Ya sabes, si quieres que tu móvil resista los chapuzones, asegúrate de que éste tenga la certificación IP68.