HomePod mini, análisis: el altavoz de Apple con sonido enorme y precio pequeño
El HomePod mini es el último altavoz inteligente de Apple. Cuenta con unas reducidas dimensiones, diseño cuidado y un gran sonido pero su precio es otro atractivo: 99 euros.
21 noviembre, 2020 01:26Noticias relacionadas
El HomePod mini es un rara avis en el catálogo de dispositivos de Apple. Como el resto de productos de la marca que podemos encontrar en España, el altavoz tiene un diseño impecable, altas características, funciones inteligentes e integración en el ecosistema, pero lo que verdaderamente ha llamado la atención de muchos usuarios es su precio: 99 euros.
Esos 99 euros suponen que se trata del dispositivo más barato que se puede encontrar en la tienda de Apple. El HomePod mini se pone a la venta por 99 céntimos menos que el Nest Audio de Google o el Echo de Amazon, toda una declaración de intenciones.
Lo que Apple busca con este altavoz es que sea un dispositivo de masas. Que todo aquel usuario de iPhone tenga también un HomePod mini. Que éste sea un ariete con el que sus usuarios empiecen a usar también Homekit, es decir: apostar fuerte por la conquistar del hogar.
El precio no debe nublar lo que es el HomePod mini. Estamos ante un muy buen altavoz, de hecho, lo que más sorprende es lo bien que suena siendo tan pequeño. Además, tenemos otros puntos clave que redondean la experiencia como son su diseño, la posibilidad de reproducir contenido de forma fácil así como el énfasis que pone Apple en la privacidad de la mano de la inteligencia de Siri.
Pequeño pero matón
El HomePod mini mantiene la línea de diseño que teníamos con el HomePod original pero en un tamaño considerablemente menor. De forma esférica con unas dimensiones de 8,34 centímetros, tenemos una malla sin costuras que no interfiere en el sonido pero que es muy elegante y atractiva. Además, también tendremos una superficie táctil superior con la que interactuar con Siri así como controlar la música.
Sin embargo, el diseño más interesante del HomePod mini está en su interior, que hace que suene muy bien. La nitidez de sonido parte de driver de rango completo que gestiona excelentemente tanto los agudos como los graves, así como radiadores pasivos con cancelación de fuerzas para mejorar la amplitud de graves. Y es que aunque no tenemos un subwoofer, la propia construcción permite la salida del sonido de tal forma que la respuesta en los graves es muy buena.
El sonido se reparte desde la parte inferior del altavoz y crea un campo de audio de 360 grados, lo que permite que se escuche muy bien desde cualquier lugar de la habitación. No importa que no estemos frente a él o que lo tengamos muy alto. Ni notaremos distorsión ni otra experiencia de sonido según dónde nos movamos.
Más allá del hardware, como es habitual en los dispositivos de Apple, la magia llega cuando entra en juego el software. Gracias al chip S5 que equipa -el mismo que tenía el Apple Watch de la generación anterior-, tendremos audio computacional. Es decir, un procesamiento en tiempo real de algoritmos que se adaptan a cada canción, contenido o volumen para que el sonido siempre sea nítido y equilibrado.
Además, también cuenta con cuatro micrófonos en su interior, funcionan simultáneamente para cancelar el sonido ambiente y detectar el comando "Oye Siri", sin importar el ruido que haya ni lo alta que esté la música. Como particularidad, en los HomePod no se pueden desconectar los micrófonos, como sí sucede en los altavoces de Google o Amazon.
Si queremos un salto de calidad en la escucha de música, es óptimo emparejarlo con otro mini para crear un sistema estéreo. Si tenemos una pareja de minis el entendimiento entre ellos es sensacional y se complementan de una forma que la música nos inunda. Eso sí, hemos de ser conscientes de que no podemos emparejarlo al HomePod original para que suenen en estéreo debido a la diferencia acústica.
Siri en su esplendor
El chip S5 no sólo aporta inteligencia al mini para gestionar mejor la música sino que hace que Siri responda mejor que nunca y podremos sacar verdadero partido al asistente inteligente de Apple.
Siri se adapta al usuario, tanto que puede hasta interactuar directamente con nuestro iPhone para, por ejemplo, mostrarnos búsquedas en el teléfono, o adaptarse a nuestro día a día. Sin embargo, el verdadero potencial es cómo se integra en el hogar siendo el mini el cerebro al que conectar dispositivos.
Va desde la posibilidad de repartir varios HomePod por la casa para tener audio multiroom a crear entornos de dispositivos inteligentes para casa con Homekit. Esto es que suene la misma canción en varias habitaciones, poner contenido incluso en otros altavoces compatibles con AirPlay 2 -como Sonos-, o gestionar luces y bombillas a base de comandos de voz.
Asimismo, con el HomePod mini también llega la función intercomunicador al ecosistema Apple. Una funcionalidad que permite mandar mensajes de audio entre los altavoces que tengamos en la casa, pero que también permite llevar a los diferentes dispositivos que tengamos vinculados, llegando hasta AirPods o CarPlay.
Una de las nuevas características con respecto al HomePod original es el chip U1, una de esas conexiones 'mágicas' propias de Apple. Este chip de proximidad permite que si por ejemplo estamos escuchando música en el iPhone, si lo acercamos al HomePod se transferirá de forma automática como si estuviese conectado por cable. Un nuevo camino en la experiencia de usuario para relacionarse con el altavoz.
Esta forma de enviar contenido es especialmente interesante si usamos un servicio como Spotify. Ya que aunque todavía no podemos pedirle a Siri que nos reproduzca música desde Spotify en el altavoz, pese a la apertura gradual del sistema, sí que podremos hacerlo desde el iPhone.
¿Me lo compro?
El HomePod mini es pequeño, bonito, suena muy bien y tiene un gran precio. Si tienes un iPhone u otro dispositivo de Apple y quieres algo que suene bien para casa sin muchas complicaciones, no te vas a equivocar con la compra o si lo regalas en navidades.
Cuenta con el aliciente además de que en torno a él puedes pasar a controlar la casa, un plus si nuestro objetivo es empezar a automatizar bombillas o enchufes, algo realmente cómodo que no te das cuenta hasta que comienzas a probarlo.
Pese a que el HomePod mini tiene un sonido excelente, el HomePod de 2018 sigue siendo muy superior en cuanto a profundidad y consistencia (y también vale tres veces más). El hermano mayor no solo suena mucho mejor y llena mejor los espacios, sino que también nos sirve en pareja como home cinema con el Apple TV 4K y tiene detección espacial, virtudes que el mini no dispone.
El gran inconveniente del HomePod mini es el mismo que el del HomePod original: debemos estar dentro del ecosistema de Apple y no querer salirnos de él. Encontraremos una serie de limitaciones y es poco práctico por ejemplo si hacemos nuestro día a día con un Android o un ordenador Windows, en ese caso tendrá más sentido optar por las opciones de Google o Amazon. Aunque ahí perderemos uno de los fuertes del HomePod, la privacidad de los datos.
En suma, el HomePod mini es uno de los productos mejor conseguidos de Apple. Está al nivel de los AirPods Pro o el propio iPhone. Es sorprendente verse con un dispositivo que aúne tan bien el espíritu de la marca y rinda de forma sobresaliente en todos los aspectos.