En cada CES 2021 Razer, la marca especializada en gaming que cada vez tiene más presencia en España, lleva su apuesta por la innovación más allá. Ideas que no necesariamente acaban viendo la luz pero que dibujan cómo se podría tener una experiencia de juego mejor.
En esta ocasión la compañía de la triple serpiente cruzada ha lanzado un innovador concepto para cambiar la forma en la que jugar en casa: una silla gaming que se transforma en una estación de entretenimiento con una pantalla panorámica desplegable de 60 pulgadas.
Proyecto Brooklyn es de momento sólo un ambicioso concepto, pero la labor de los diseñadores en este tipo de acciones es resolver futuros problemas y aportar soluciones en otros productos.
Experiencia inmersiva
Razer busca que una silla gaming pase a ser una estación de juego de consola o PC, sin la necesidad de sacrificar permanetemente espacio en casa. "Los modelos de sillas todo-en-uno existentes ofrecen asientos de estilo cockpit, con un hardware montado del tamaño de la habitación y con grandes costes", explica la empresa, que plantea Brooklyn como su alternativa.
Sería una experiencia completa. Contaría con una silla de juego construida con fibra de carbono e iluminación RGB que se transforma fácilmente en una estación de juego totalmente inmersiva con pantallas panorámicas gracias a una pantalla desplegables de 60 pulgadas. Además, contaría con retroalimentación táctil integrada en el asiento y reposabrazos 4D que se despliegan en sus mesas periféricas ajustables.
A diferencia de la Iskur, aquí se conectaría la silla de juego a la pantalla y a sus componentes más funcionales, como el reposabrazos, aunque se mantendría la comodidad de cojines de espuma de alta densidad que dan soporte de forma única al cuerpo del usuario.
Experiencia inmersiva
Sin embargo, el factor diferencial del diseño es la pantalla curvada y desplegable que quedaría a la altura de los ojos del usuario. Desde la columna vertebral de la silla y con una activación desplegable, al tocar un botón saldría una pantalla OLED 60" full surround para un detalle y cobertura visual total. Cuando no se esté usando, esta pantalla se plegaría en la parte posterior de la silla.
Además, los apoyabrazos esconden mesas plegables, lo que le permite cambiar fácilmente entre juegos de PC que usan ratón y teclado, y juegos de consola. "Cuenta con paneles separados en cada reposabrazos que permiten diferentes tamaños/modelos de teclado y ratón y cada mitad se pliega cuando no está en uso", explica la compañía.
Otro de los puntos con los que Razer quiere llevar la experiencia inmersiva del proyecto Brooklyn es a lo que siente el jugador. Se construiría una nueva integración nativa de la tecnología Razer HyperSense en torno al marco de la silla para ofrecer lo último en inmersión táctil. Así se tendrían vibraciones más sensibles que se sienten durante una sesión de juego, como saltar al agua o aterrizar en una plataforma, "para una jugabilidad verdaderamente inmersiva".
Además, como no podía faltar en un producto Razer de alta gama, también tendría un sistema de iluminación RGB con Razer Chroma. "La tecnología de iluminación Razer Chroma RGB está integradas en las zonas exteriores de los cojines del asiento, pudiendo personalizarse gracias a 16,8 millones de opciones de colores, sincronizado junto con los periféricos y con más de 150 títulos de juegos integrados", explica la empresa.
En cualquier caso, el Proyecto Brooklyn se quedará en concepto ya que "está diseñado para ofrecer información sobre cómo mejorar la mecánica y el diseño para ofrecer a los usuarios una experiencia de juego más inmersiva e inspirar la creciente gama de sillas gaming de Razer en un futuro próximo", explica la compañía.