Desde hace muchísimos años, la idea de conseguir un coche volador ha sido un hito a alcanzar por los seres humanos. Lo mismo ocurre con el sueño de conseguir una moto voladora, similar a las que han poblado videojuegos y películas lanzadas en España. La firma JetPack Aviation está persiguiendo esa misma idea y ya tiene un prototipo entre manos increíblemente avanzado: la P2 Spender.
Si bien se asemeja a una moto voladora, este no es más que un vehículo VTOL, es decir, un vehículo aéreo de despegue y aterrizaje vertical. Potenciada por 8 turborreactores de tamaño compacto, es capaz de volar de forma horizontal a una velocidad de 241 kilómetros por hora y ascender 4.572 metros, además de soportar 109 kilos. Y por cierto, es bastante ligera, ya que solo pesa 104 kilos.
En efecto: es básicamente un pequeño avión con el factor de forma de una moto, aunque con la idea de que el piloto pueda ir sobre su chasis. Puede volar por un tiempo de entre 10 y 22 minutos, dependiendo del peso del piloto y de la densidad del aire. Usa combustible sostenible de aviación SAF y se puede manejar con piloto o sin él. De hecho, ya se están planteando pruebas de vuelo con control remoto de su último prototipo.
La moto voladora
A nivel estético, la P2 Speeder al menos en su prototipo integra unas líneas agresivas y propias de una distopía cyberpunk. La estructura está hecha en fibra de carbono y el asiento principal del piloto recuerda poderosamente al de una moto de competición, ya que pone al piloto en una posición muy similar.
Está construida sobre un diseño modular e integra un sistema de control remoto para poder ser controlada a distancia. También monta un sistema patentado para controlar que la moto mantenga el equilibrio en todo momento, incluso frente a fallos de motor. De esta forma, se evita que el piloto pueda sufrir daños extremos en caso de sucederse una avería, ya que este está expuesto.
Monta una cúpula frontal para la aerodinámica y para proteger del viento. Una pantalla frontal se encarga de mostrar en todo momento la información del vuelo y se controla mediante joysticks, ofreciendo según la compañía una total libertad a la hora de realizar los vuelos. El ángulo de las turbinas a reacción se realiza mediante este mismo sistema de equilibrado.
La idea, según explica JetPack Aviation, es la de usar el P2 Speeder para situaciones muy específicas, como rescates en emergencia, patrullaje y vigilancia aérea así como transportar carga, pese a que su autonomía no sea actualmente su mejor baza. No obstante, la fijación de la compañía con este modelo es el mercado de defensa militar. Futuras versiones, espera la compañía, mejorarán aspectos como la carga abriendo la puerta a su uso en el terreno industrial.
Primeros vuelos este año
Aunque es impresionante, es aventurado hablar de este dispositivo como una moto voladora, sino como un prototipo de esta misma idea. De hecho, aún sin haber sido lanzada de forma oficial, ya están pensando variantes de todo tipo para mejorar sus características técnicas.
Se realizarán las primeras pruebas de vuelo controladas de forma remota en el tercer trimestre de año. Las pruebas con pilotos se retrasarán, sobre todo teniendo en cuenta que aún queda porque JetPack Aviation consiga los permisos necesarios de la Administración Federal de Aviación de los EEUU para poder certificar en primera instancia el vehículo como vehículo experimental y posteriormente comercializar el modelo final. Se espera que estas pruebas pilotadas se lleven a cabo o bien a finales de este año o a principios de 2023.
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