Actividades como el spinning pusieron de moda más que nunca las bicicletas estáticas en España y durante la pandemia fueron uno de los elementos clave para mantenerse en forma sin salir de casa, aunque no ofrezcan por completo los beneficios de hacer ciclismo. Un nuevo invento simula la inclinación de la bicicleta al tomar una curva y pone a prueba más músculos del cuerpo.
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Curveplate permite inclinar hacia los lados la bici estática y simular una carrera más parecida a la que se realizaría al aire libre, para que cuando el entrenamiento sugiere subir una montaña, es esfuerzo sea real. Lo más interesante es que está diseñado para instalarlo en casi cualquier modelo estático que puedas tener en casa.
Sus creadores han lanzado esta idea en Kickstarter donde buscan financiación para poder lanzar al mercado su diseño y que la mayoría de usuarios lo puedan integrar en sus bicicletas estáticas. Ya han conseguido más de 10.000 euros.
Este invento consta de dos balancines en cada soporte de la bicicleta, como si se tratara de dos patines de esquí acuático, pero la bici permanecería en el sitio sin deslizarse. Están fabricados con plástico moldeado por inyección que se refuerza con fibra de vidrio, pueden cargar con 240 kilogramos de peso entre la bicicleta y el usuario.
El sistema se puede integrar en la bicicleta estática que cada uno tiene en su casa o las que ofrecen los gimnasios, pero hay ciertas excepciones. No se puede unir a aquellos modelos montados sobre rodillos de resistencia magnética, estas bicicletas tienen dos barras en la parte trasera conectadas con la delantera que no son compatibles con el Curveplate
En el resto de diseños, la base se ata al sistema inclinarse con dos correas de poliamida y velcro. Una vez está instalada la bicicleta estática encima se puede inclinar hasta un máximo de 9 grados hacia los dos laterales sin llegar a volcar. Los ciclistas pueden entrenarse pedaleando y simulando que toman una curva en el recorrido.
Este movimiento añadido al entrenamiento permite fortalecer otros músculos como los que están implicados en la estabilidad central, así como el sentido del equilibrio, pero en parado. Para cuando se quiera salir al aire libre, la fuerza y destreza necesarias sean similares.
Los creadores del Curveplate asegura que otro de los beneficios de este sistema es la reducción de las molestias del sillín, al hacer el juego de inclinarse para un lado y otro, la zona no nota tanta presión mientras se pedalea.
Desde la plataforma Kickstarter, Curveplate se promociona con una oferta de financiación por 119 euros. Con ese precio se puede obtener el producto y accesorios completos, dos patines y las correas. Cuando se termine esta fase, si consigue lanzarse al mercado está previsto que cueste hasta 189 euros.