Cada vez más ciudades en España se están adaptando a los nuevos tipos de transporte. Aunque si hay uno que nunca 'muere' esa es la bicicleta, como demuestra el último Barómetro de la Bicicleta que realiza la DGT y la Red de Ciudades por la Bicicleta: 20 millones de españoles utilizan la bici con cierta frecuencia. Así, más del 50% de la población está de enhorabuena, ya que algunas empresas están diseñando el dispositivo perfecto para convertir una bicicleta eléctrica en una de montaña en el menor tiempo posible.
[Esta pieza protege a las bicicletas de montaña de cualquier impacto por grande que sea]
Una de las encargadas de conseguir el Santo Grial de la bicicleta es Livall, especialista en mejorar la experiencia del usuario una vez se suba al sillín. Y es que con su primera inmersión en el mercado ya dejaban claro sus intenciones: el primer casco de bicicleta inteligente. En esta ocasión, han pensado en aquellas personas que quieren recibir asistencia motorizada cuando terminan cansándose de pedalear.
PikaBoost es un kit de conversión que se adapta a cualquier tipo de bicicleta y cumple con la mayoría de funcionalidades que ofrece una bicicleta eléctrica. Pero lo que es mejor: todo ello por un precio mucho más asequible. Es más, en su web se puede ya reservar este dispositivo con un descuento del 48%.
¿Cómo funciona?
Lo primero que destacan desde Livall acerca de su nuevo producto es que resulta muy fácil y rápido de montar en la propia bicicleta. Se trata de una pequeña caja de 34 cm de longitud con una pinza en un lado y un rodillo en el otro. Es por este motivo por lo que Livall promete una instalación en menos de 30 segundos.
Así es, este dispositivo no necesita ningún tipo de herramienta para su instalación. Uniendo uno de los extremos a la tija del sillín y dejando la otra parte reposar sobre la rueda trasera ya estaría listo para su uso.
A la hora de quitarlo de la bicicleta tampoco habría ningún problema en ello, y además se podría utilizar en otra distinta o guardarlo en caso de que estuviera aparcada en la calle. Como todo producto que sale al mercado a día de hoy, este gadget cuenta con conexión Bluetooth para poder bloquearlo desde un móvil.
También es capaz de detectar la fuerza de la frenada y la reducción de la velocidad, y entonces la asistencia se cortaría automáticamente. El dispositivo es capaz de recuperar la energía del frenado siempre y cuando éste se haga de manera progresiva y no brutal.
Motor silencioso y ligero
Si está pensando que al incorporar a su bicicleta cualquier a cientos de kilómetros se enterará, se equivoca. Y es que ofrece un motor silencioso de 250 W que se adapta a los terrenos más accidentados y en las carreteras inclinadas. Esto se produce gracias a una variedad de sensores avanzados que forman parte de la tasa adaptativa autorregresiva (AAR, por sus siglas en inglés).
no solo se adapta a la fuerza del pedaleo del ciclista, sino que también es capaz de detener el motor. "Con el sensor Hall lineal de dos ejes incorporado, el giroscopio, el acelerómetro y el algoritmo de actitud exclusivo de PikaBoost, nuestro dispositivo puede detectar la velocidad y la actitud de la bicicleta en tiempo real", aseguran desde Livall. Es más, detecta al instante cuando se produce un deslizamiento o una caída, por lo que se garantiza la seguridad del ciclista. Y es que la asistencia eléctrica que proporciona este dispositivo no depende de la cadencia de pedaleo ni del par aplicado a los pedales.
Además, ofrece tres modelos de conducción distintos. Uno de ellos es el conocido como "Roll", que suprime la asistencia en cuanto el acelerómetro integrado detecta un descenso. Por el contrario, cuenta con un segundo modo en el que se facilita la subida a la hora de encontrarse ante una cuesta. Y por último, también tiene un modo de conducción con asistencia eléctrica permanente para terrenos llanos.
Su peso total es de 3 kg, por lo que se puede guardar sin ningún problema en cualquier espacio. La autonomía del sistema Livall Pikaboost es de unos 30 km aproximadamente con una sola carga, que viene a durar unas tres horas. Se vende en una sola unidad, por lo que no incluye los compartimentos de la batería extraíble. Además, la bicicleta no puede tener suspensión trasera, pues este dispositivo solo funciona a la perfección con una bicicleta rígida.
Dentro del motor, hay una batería de 234 W que le suministra la energía suficiente como para impulsar la rueda de la bici. Pero sí que añade una luz trasera, una de freno e incluso un cargador USB para cargar el móvil mientras se hace uso de esta 'nueva' bicicleta eléctrica.
También te puede interesar:
- Este gadget convierte tu bicicleta de montaña en eléctrica en segundos
- Este motor cambiará la forma en la que usas tu bicicleta eléctrica
- La bicicleta eléctrica ligera que puedes plegar al extremo para llevarla a cualquier lado
- La bicicleta eléctrica con dos motores que alcanza los 50 kilómetros por hora