Productos gaming hay muchos en España. Lidl, sin ir más lejos, tiene en su haber varios dispositivos pensados para los más jugones a precios brutales. Pero sin duda alguna uno de sus productos más conocidos es su puff gamer, un asiento esponjoso pensado precisamente para jugar a videojuegos. Ahora, ese puff vuelve a estar disponible.
El puff de Sitting Point es ideal para los que quieren la comodidad de una silla pero sin el formato habitual. Está pensado para interiores y cuenta con una comodidad extrema para el día a día de cualquier gamer que se precie. Está rebajado de 149 a 99 euros, y aunque las variantes no están disponibles online, sí que se podrá comprar pronto.
Es un puff que cuenta con algunos detalles muy interesantes, como bolsillos para guardar mandos y botellas así como motivos estéticos rojos o azules para mejorar su estética. Un gran producto que ha arrasado en el pasado y que ahora llega justo para finales de año.
Un puff gamer
Este puff tiene unas medidas de 117 x 57 x 58 centímetros, además de un peso de 3,96 kilos. Puede soportar hasta 100 kilos de peso, y se amolda a la figura de la persona que se siente en él gracias a su relleno fabricado en poliestireno de alta calidad. Lógicamente, es un puff individual que, por cierto, está recubierto en tela.
Usa una estructura interna robusta pensada para largas jornadas de juego y debido a su relativo poco peso se puede transportar por la casa. La parte baja tiene mucho espacio para albergar las piernas y el resto de la parte baja del cuerpo, y la parte de la espalda permite adoptar una pose algo más recta sin sacrificar en comodidad.
Puff gamer
En el lateral tiene 3 bolsillos para guardar mandos de consola, mandos de televisores y botellas de refresco. No falta una pequeña correa para colgar los auriculares o en su defecto unos cascos de realidad virtual. Simplemente se enganchan los auriculares a la correa y se pega para que no se suelten en ningún momento.
Este modelo es prácticamente idéntico al que ya vimos de la firma Gamewarez hace unos meses, pero bajo otro nombre de marca. Lo único que le falta al puff para ser gamer son luces RGB, que por otro lado ayuda a que la estética sea más sobria para el usuario.
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