Los exoesqueletos son unas de las últimas tendencias en el sector tecnológico, tanto en España como en todo el mundo. Unos dispositivos que están asociados a una gran variedad de tareas, desde ayudar al usuario a hacer deporte sin esfuerzo hasta caminar y correr más rápido sin cansarse. Incluso los astronautas que vayan de nuevo a la Luna utilizarán uno pensado en el esfuerzo físico. La última novedad es un exoesqueleto pensado para realizar trabajos en la construcción que ofrece fuerza adicional y alivia la tensión del cuello.

Festool, un fabricante de herramientas eléctricas y neumáticas con sede en Wendlingen (Alemania), ha ideado ExoActive, el que denominan como "el primer exoesqueleto activo para los trabajos por encima de la cabeza; que dejarán de ser duros, tanto si se trata de trabajos de construcción en seco o de pintura, empapelado o montaje, como en paredes y en techos". Un dispositivo ligero (pesa 7 kilogramos) y cómodo de llevar que brinda fuerza adicional al usuario cuando los brazos comienzan a cansarse. 

La compañía señala en su web que gracias a este exoesqueleto el usuario realiza menos esfuerzo físico, lo que se traduce en "más eficiencia, más concentración en su trabajo y más alegría por trabajar". Una de las principales ventajas de esta máquina es que el operario puede regular la capacidad de apoyo necesario en segundos para que el exoesqueleto le ayude justo donde lo necesita. 

El exoesqueleto ExoActive. Festool Omicrono

El funcionamiento de ExoActive es el siguiente. El exoesqueleto cuenta con una batería de 18 voltios que se carga rápidamente y que alimenta un compresor, por lo que se trata de un sistema de apoyo activo. Un depósito de aire comprimido actúa como acumulador de energía en el que se puede volver a introducir la energía sobrante, por ejemplo, cuando los usuarios bajan de nuevo los brazos.

Una vez colocado y encendido, esta máquina otorga fuerza adicional para realizar trabajos por encima de la cabeza mediante cilindros de aire acoplados a los brazos. En cuanto a su ficha técnica, este dispositivo ofrece una capacidad de apoyo de 50 Newtons (el equivalente a unos 5 kg) por antebrazo -que se controla mediante sensores instalados en las articulaciones de los brazos de ExoActive-, un apoyo activo para tres zonas de trabajo (desde la pelvis hacia arriba, desde el pecho hacia arriba, por encima de la cabeza) y un total de cinco niveles de ayuda. 

La empresa destaca que su invento ofrece una variedad de ventajas que van más allá de aportar fuerza adicional, lo que alivia los hombros y el cuello. El exoesqueleto de Festool se puede ajustar a la tarea correspondiente en cuestión de segundos mediante un mando a distancia y pausarse por completo en caso de que fuera necesario. Igualmente, el fabricante señala que su invento es tan fácil de poner como una mochila y se adapta ergonómicamente y a la perfección a diferentes cuerpos; pudiendo ajustarse a la talla corporal de cada persona.