Así es el reloj de lujo fabricado con piezas del SR-71 Blackbird, el caza furtivo que EEUU usó durante la Guerra Fría

Los amantes de la aviación ahora pueden conseguir un recuerdo de uno de los aviones más rápidos del mundo: el SR-71 Blackbird. La marca de relojeros ha celebrado el décimo aniversario de su llamativo modelo EMC SR-71 diseñando una edición limitada con piezas de este mítico avión espía supersónico. 

Con un diseño único que capta todas las miradas, el reloj EMC SR-71, nació en 2014. Su diseño se inspira en el tablero de control del avión de los años 60 y cuenta con un mecanismo de máxima precisión. Se trata de un modelo de cuerda que la empresa ha querido actualizar para su décimo aniversario con una edición limitada de solo 10 unidades cuyo precio se equipara con el coste de un coche de carreras.

A pesar de la popularidad de los smartwatches, los relojes analógicos siguen teniendo su público. Las marcas apuestan por llamar la atención con diseños imposibles como un reloj vertical con sistema de tornillos sin fin o el reloj más delgado del mundo. La última pieza de ingeniería que desafía todo lo conocido hasta ahora es este EMC SR-71.

Reloj EMC SR-71

No es un modelo discreto,  pues lo interesante es generar una conversación en torno a este peculiar reloj. Cuenta con una caja de 49,57 mm que simula el tablero de instrumentos de vuelo de esta joya de los años 60. Se compone de cuatro diales: uno estándar que marca las horas y minutos; un segundero; un indicador de reserva de energía; y un tercer indicador que muestra la precisión del reloj en cualquier momento.

Pulsando un botón se puede medir la precisión cronométrica del movimiento mecánico y comprobar el rendimiento del reloj en tiempo real. Incluso, es posible regular el reloj hasta alcanzar el Grial, la medición perfecta del tiempo. Cuenta con un un oscilador electrónico de 16.000.000hz, como indica el fabricante.

Interior del EMC SR-71 Urwerk Omicrono

Entre las mejoras que se han añadido para la edición limitada, destaca la incorporación de piezas fabricadas con aleación de titanio del fuselaje del SR-71. Las piezas se han fundido para integrarlas en el reloj. Otro detalle que no pasa desapercibido es la manivela lateral que permite darle cuerda.

Las 10 unidades de este reloj se han puesto a la venta por 150.000 francos suizos, lo que equivale a 159.016 euros de precio. Con ese precio, pocas personas se pueden permitir lucir en la muñeca este reloj, quizás se lo planteé Elon Musk. El multimillonario, fundador de SpaceX y Tesla, es un gran apasionado de la aviación, tanto que se inspiró en el precursor del Blackbird para el nombre de uno de sus hijos: X Æ A-12. Este curioso hombre es un homenaje, en parte al Lockheed Martin A-12 Archangel, avión desarrollado en los años 50 y que fue precursor del mítico SR-71 Blackbird.

Avión Blackbird

El Lockheed Martin SR-71 Blackbird reinó en su segmento desde su introducción en 1966, en plena Guerra Fría, hasta su último vuelo militar en 1998 y en 1999 para la NASA. Las Fuerzas Armadas de Estados Unidos retiraron los Blackbird en 1990 debido a un ajuste presupuestario y al empleo de drones y satélites. Eso sí, los rescataron 5 años después para continuar realizando labores de reconocimiento durante la guerra de Iraq.

Lockheed Martin SR-71 Jim Gordon Omicrono

El diseño de esta aeronave supersónica fue todo un quebradero de cabeza para los ingenieros que tuvieron que lidiar con las dilataciones del fuselaje y de otras partes internas del avión debido a que era capaz de triplicar la velocidad del sonido. El SR-71 podía llevar una carga útil de 1.600 kilogramos, tenía hasta 5.400 kilómetros de autonomía, 26.000 metros de altitud de vuelo máxima y una velocidad punta de 3.540 km/h (algo superior a Mach 3). 

Esta aeronave contaba con dos miembros en la tripulación: un piloto y un operador encargado de los sensores y cámaras. El Blackbird fue el primer avión diseñado para pasar desapercibido en los radares debido a su 'discreta' silueta y formato. Aunque después se comprobó que sus propiedades furtivas no lo eran tanto, ya que durante los años 80 protagonizó algunos encontronazos con cazas soviéticos.