España está viviendo con gran entusiasmo la semana de lanzamientos de Apple. Primero fue el iMac M4, el ordenador de sobremesa con nuevos colores y pantalla antirreflejos. Le siguió el reciente Mac Mini, con un profundo rediseño físico y ahora le toca el turno a los nuevos MacBook Pro, que además de estrenar nuevos chips M4, también equipan los nuevos procesadores de la compañía de Cupertino: los M4 Pro y M4 Max.

El primer dispositivo en presentar los chips M4 de Apple fue el iPad Pro, que desafiaba a la física con un apartado físico finísimo, y desde entonces la firma ha estado introduciendo estos procesadores en sus últimos equipos. Como ya es tradición, Apple ha presentado nuevos MacBook Pro que estrenan las esperadas variantes M4 Pro y M4 Max. Eso sí, el Mac mini de nueva generación ya incorporaba el chip M4 entre sus opciones.

Apple resalta aspectos esenciales de estos dos nuevos chips, como su altísima eficiencia energética y su clara dedicación a la inteligencia artificial, pensados específicamente para potenciar Apple Intelligence, la suite de funciones de IA de la empresa. Y es que tanto los M4 como los M4 Pro y M4 Max integran el nuevo proceso de fabricación de 3 nanómetros de segunda generación.

Así son los nuevos M4 de Apple

La base de esta nueva familia de chips radica en el procesador M4, la estrella que ha protagonizado esta masiva renovación por parte de Apple. Cuenta con una CPU de 10 núcleos, que divide sus núcleos en 4 cores de rendimiento y otros 6 cores dedicados a la eficiencia. Además, Apple asegura que estos procesadores incluyen el núcleo de CPU más rápido del mundo, y nuevos aceleradores para el aprendizaje automático.

El M4 base puede ascender hasta los 32 GB de memoria unificada y aumenta su ancho de banda hasta los 120 gigabytes por segundo. El motor de pantalla también ha sufrido cambios en forma de optimizaciones, permitiendo que el chip pueda emitir imagen a dos monitores externos incluso si el ordenador ya cuenta con pantalla integrada. Por otro lado, monta hasta cuatro puertos Thunderbolt 4 y una GPU sustancialmente más potente, con el doble de capacidad para la aceleración de trazado de rayos por hardware.

Entramos en los nuevos procesadores recién estrenados con los Mac mini y con los nuevos MacBook Pro: los chips M4 Pro y M4 Max. El M4 Paro sube la apuesta a los 14 núcleos, con 10 de rendimiento y 4 de eficiencia. Su GPU puede admitir un total de 20 núcleos, una configuración que duplica el rendimiento gráfico del M4 base. En cuanto a inteligncia artificial, Apple asegura que su M4 Pro es 2,4 veces más rápido que "el chip más reciente para IA de PC lanzado en el mercado". 

El SoC puede admitir 64 GB de memoria unificada en su configuración más alta y un ancho de banda brutal de 273 gigabytes por segundo, lo que supone un avance del 75% respecto al chip M3 Pro, lanzado apenas un año antes. Incluso monta el nuevo estándar Thunderbolt 5, con velocidades de transferencia de 128 gigabytes por segundo. No falta la presencia del Neural Engine, el motor de inteligencia artificial integrado para funciones de IA como Apple Intelligence.

La idea detrás del M4 Pro se resume en más potencia y más capacidades para inteligencia artificial, idóneas para flujos de trabajo que precisen de tecnologías de esta índole (ingeniería, desarrollo, creatividad, etcétera). No es para menos; la nueva optimización para el trazado de rayos por aceleración de hardware abre la puerta a más potencia para renderización, mejor rendimiento en videojuegos...

Por último está la bestia: el chip M4 Max, el nuevo tope de gama dentro de la familia de procesadores de Apple, a falta de que se lance el futurible M4 Ultra. El M4 Max en sus mayores configuraciones soporta 16 núcleos en CPU y nada menos que 40 núcleos de rendimiento en la GPU. En el caso de la CPU, los núcleos se dividen en 12 núcleos de rendimiento y 4 de eficiencia, en una clara apuesta por la potencia bruta.

De hecho, la GPU es la gran beneficiada del M4 Max. El motor multimedia del chip monta a su vez un doble motor de codificación de vídeo, junto a dos aceleradores ProRes, dedicados enteramente a tareas englobadas en el terreno del sector audiovisual. Por ejemplo, el SoC puede admitir códecs acelerados por hardware como ProRes Raw, HEVC y H.264.

Las cifras de Apple hablan por sí solas; comparando el procesador con el M1 Max, el primer procesador de la gama M en esta línea, queda clara su superioridad. Es 2,2 veces más rápido en CPU y 1,9 veces más veloz en rendimiento de GPU. En el campo de la inteligencia artificial, especialmente en lo que a gráficos refiere, el M4 Max es 4 veces mejor al "chip más rápido de PC para IA".

En este caso, la memoria unificada se alza hasta los 128 GB y el ancho de banda se multiplica, soportando 546 gigabytes por segundo. Apple afirma que con toda esta potencial, un desarrollador podría interactuar con modelos de lenguaje de 200.000 millones de parámetros sin apenas esfuerzo. De ahí que los equipos con el M4 Max estén más pensados para entornos donde dicha potencia se aproveche, tales como artistas 3D, analistas de datos y desarrolladores que trabajen con modelos de inteligencia artificial, manteniendo una eficiencia energética excelsa en la industria.