Si hay un usuario exigente con lo que puede ofrecer un monitor ese es el aficionado a los videojuegos, algo que se eleva a la enésima potencia cuando hablamos de un gamer profesional. En el juego competitivo un milisegundo puede ser la clave para conseguir la victoria, y por eso el sector de los monitores gaming no deja de innovar, ofreciendo en España modelos cada vez más grandes y con mejores prestaciones.
AOC, uno de los referentes del sector, acaba de anunciar el lanzamiento de su nueva serie de monitores para gaming G42, con unidades de 23,8, 24,5 y 27 pulgadas. Estos dispositivos destacan por integrar paneles Fast IPS de última generación, capaces de alcanzar una tasa de refresco de 180 Hz y un tiempo de respuesta GtG de 1 ms, optimizando la experiencia en todo tipo de juegos. Con esta nueva línea, AOC eleva el estándar de rendimiento en el segmento de monitores accesibles, ofreciendo una fluidez tres veces superior a la tasa de refresco convencional de 60 Hz.
Inspirada en el éxito de la serie G4 de AOC GAMING, que incluía las versiones G4X con ergonomía avanzada y los modelos G4XE más asequibles, la gama G42 busca simplificar aún más la oferta sin comprometer el alto rendimiento.
Todos los modelos de la serie G42 cuentan con resolución Full HD (1920 x 1080 píxeles) y ofrece tiempos de respuesta ultrarrápidos, sino que también garantiza una excelente reproducción del color. Gracias a su cobertura del 90% del espacio DCI-P3 y del 120% de sRGB, estos monitores proporcionan imágenes vibrantes con ángulos de visión de 178 grados, tanto en horizontal como en vertical.
César Acosta, Gaming Product Manager de AGON by AOC, explica la importancia de esta serie para democratizar el acceso a monitores gaming de alto rendimiento. "Nuestra misión es hacer que la mejor tecnología esté al alcance de más jugadores. Con la serie G42, seguimos impulsando el gaming competitivo con tasas de refresco elevadas e inmersión total", señala Acosta en un comunicado de prensa.
En cuanto a funciones adicionales, la serie G42 conserva características esenciales para el gaming, como Shadow Control, que mejora la visibilidad en zonas oscuras; Game Colour, que permite ajustar la saturación de color; y la función Motion Blur Reduction, que incrementa la nitidez en escenas de acción. Además, incluyen una cruceta virtual Dial Point para mejorar la precisión en juegos sin HUD integrado. Para mayor comodidad, los ajustes de imagen pueden modificarse mediante el menú OSD accesible a través de botones físicos o mediante el software G-Menu.
Los monitores también son compatibles con Adaptive-Sync, lo que garantiza una experiencia fluida tanto con tarjetas gráficas de AMD como de Nvidia. Asimismo, admiten consolas de última generación a 1080p y 120 Hz, ampliando su versatilidad más allá del PC gaming.
El diseño de estos monitores ha sido pensado para optimizar el espacio en cualquier escritorio, con un soporte compacto que permite ajuste de inclinación (-5°/23°) y es compatible con montajes VESA. En cuanto a conectividad, cada modelo incluye un puerto DisplayPort 1.4 y un HDMI 2.0, además de un conector de audio de 3,5 mm para auriculares o altavoces externos.
La elección entre los tres modelos, ya disponibles en España, dependerá de las preferencias del usuario. El de 23,8 pulgadas (149 euros), ofrece la mayor densidad de píxeles, ideal para quienes buscan máxima nitidez en un formato compacto. Por su parte, el de 24,5 pulgadas (159 euros), responde al tamaño estándar en eSports, equilibrando visibilidad y espacio de juego. Finalmente, el modelo de 27 pulgadas brinda una experiencia más envolvente, ideal para configuraciones de escritorio más amplias.