El frío y las lluvias del invierno no solo incrementan el consumo energético y el uso de la calefacción, sino que también traen consigo un enemigo silencioso en muchos hogares: la humedad. Esta no solo genera una sensación incómoda en el ambiente, sino que también obliga a depender constantemente de la secadora para poder secar la ropa en interiores.
Durante esta época del año, la humedad tiende a dispararse en la mayoría de los hogares en España debido al mayor uso de la calefacción, la falta de ventilación adecuada o un aislamiento deficiente. Como resultado, tender la ropa dentro de casa puede convertirse en un proceso interminable, donde las prendas tardan días en secarse por completo, contribuyendo aún más a la acumulación de humedad en el ambiente.
Para poner fin a este problema, en Leroy Merlin hemos encontrado una de las mejores soluciones: el deshumidificador y purificador de aire Noaton DF 4114. Este dispositivo no solo destaca por su eficiencia a la hora de eliminar la humedad en cualquier estancia, sino que también incluye una función específica para acelerar el secado de la ropa, además de otras características innovadoras que lo hacen más eficiente que los modelos convencionales. Todo ello, además, con un descuento exclusivo en la web, donde ahora se puede conseguir por 179 euros, un precio que no tardará en agotarlo en cuestión de pocos días.
El deshumidificador que arrasa en Leroy Merlin
El deshumidificador Noaton DF 4114 es una de las opciones que arrasa en España para mantener el ambiente libre de humedad y mejorar la calidad del aire en espacios de hasta 25 m². Este cuenta con una capacidad de extracción de 13,5 litros en 24 horas, por lo que este dispositivo es clave para prevenir problemas de humedad, moho y malos olores en el hogar. Este cuenta además, con unas dimensiones de 50 cm de ancho, 28 cm de alto y 20 cm de profundidad, por lo que puede ubicarse fácilmente en cualquier estancia sin ocupar demasiado espacio. Además, cuenta con ruedas para facilitar su transporte.
Otra de las características más destacadas de este dispositivo, es su filtro purificador de carbón, este es capaz de atrapar impurezas como polvo, alérgenos y polen, además de neutralizar olores. Un sistema que se complementa con un filtro HEPA, garantizando un aire más limpio y saludable. El dispositivo también incorpora un higrostato que permite ajustar el nivel de humedad entre el 20% y el 95%, asegurando un ambiente confortable en cualquier época del año. Todo ello se suma a su indicador LED, el cual facilita el control de la humedad relativa del entorno en todo momento.
Deshumidificador y purificador de aire Noaton DF 4114.
Otra de las peculiaridades de este dispositivo, es que dispone de apagado automático cuando el depósito de 2 litros alcanza su capacidad máxima, evitando derrames y facilitando su mantenimiento. También integra un temporizador y una función de memoria, la cual permite programarlo según las necesidades del usuario. Para mayor seguridad en hogares con niños, incorpora un bloqueo infantil, impidiendo modificaciones accidentales en la configuración.
Otra de las novedades que presenta este deshumidificador en comparación con otros modelos más clásicos, es su opción de desagüe continuo, la cual permite conectar un tubo para evitar el vaciado manual del depósito. Además, también cuenta con una función destinada al secado de ropa, la cual es ideal para acelerar el proceso de secado en interiores, especialmente en días húmedos o fríos. También dispone de un sistema de descongelación automática, por lo que puede funcionar en temperaturas de 5 a 35°C sin comprometer su rendimiento.
En cuanto a consumo energético, el Noaton DF 4114 también destaca por su eficiencia, con un consumo inferior a 180W en modo deshumidificación y menos de 28W cuando se usa solo en modo purificación de aire, ofreciendo un muy buen equilibrio entre rendimiento y gasto eléctrico. Su nivel de ruido de 36 dB lo convierte en una opción silenciosa, adecuada para dormitorios, oficinas o cualquier estancia donde se requiera un ambiente tranquilo.
Otras formas de reducir la humedad en el hogar
Más allá de evitar tender la ropa dentro de casa durante largos periodos de tiempo o aprovechar las ventajas de los deshumidificadores, mantener un hogar libre de humedades puede convertirse en todo un reto, especialmente en épocas de frío o en zonas con un clima especialmente húmedo. Aunque algunos factores que contribuyen a su aparición son difíciles de controlar, como la falta de ventilación o el propio uso de la calefacción, hay ciertos hábitos que pueden ayudar a reducir significativamente el problema y a prevenir la acumulación de humedad en paredes, techos y muebles.
Uno de los primeros pasos clave es realizar revisiones periódicas en la vivienda, prestando especial atención a las zonas más expuestas a la humedad. Detectar los primeros signos de condensación o filtraciones puede marcar la diferencia entre una solución sencilla o enfrentarse a problemas más serios, como la aparición de moho o el deterioro de materiales. También es fundamental revisar las cubiertas de la casa y mantenerlas limpias, sobre todo si se vive en una zona lluviosa.
Muchas veces, en estas áreas se acumulan hojas, suciedad o restos que pueden impedir la correcta evacuación del agua, lo que a la larga genera filtraciones. Además, es recomendable inspeccionar regularmente los elementos instalados en el tejado, como antenas o unidades de aire acondicionado, para asegurarse de que no contribuyan a la acumulación de humedad.
Otro hábito esencial para prevenir la condensación y renovar el aire del hogar es la ventilación diaria. Lo ideal es abrir las ventanas durante al menos 15 o 20 minutos cada día, prestando especial atención a aquellas habitaciones donde se genera más vapor, como la cocina o el baño. Esto permite que el aire húmedo se renueve y evita la acumulación de agua en superficies frías.
Sin embargo, en invierno, cuando las temperaturas son más bajas, es común depender en exceso de la calefacción para mantener una sensación de confort en casa. Reducir la temperatura a unos 20 grados puede ser una estrategia efectiva para evitar contrastes bruscos entre el interior y el exterior que favorecen la formación de humedad.