Ya había muchos usuarios algo decepcionados con la actualización de Agosto para Windows 8.1, al no tratarse de la esperada Update 2 con una gran cantidad de novedades como la vuelta del menú inicio, sino de una simple recopilación de parches sin demasiados cambios. Curiosamente, esto no ha impedido a Microsoft fallar estrepitosamente en la publicación de esta actualización menor, hasta el punto de que está pidiendo a los usuarios que la desinstalen. Todo empezó con algunos usuarios que sufrieron de pantallazos azules (las conocidas como BSoD, “Blue Screen of Death”),  y ahora la compañía ha revelado que parte del código distribuido a los usuarios provoca problemas en vez de solucionarlos.

Qué parches hay que desinstalar

En particular, los cuatro parches que debemos desinstalar son los siguientes:

• 2982791 MS14-045 Esta es la que es mas recomendable desinstalar, ya que afecta al kernel de Windows y es la que está provocando los pantallazos.
• 2970228
• 2975719
• 2975331

Podemos desinstalar estas actualizaciones en el menú de Añadir y quitar programas, donde deberíamos ver un enlace para ver las actualizaciones; solo tenemos que hacer click derecho en ellas y elegir “Desinstalar”. Mientras tanto, Microsoft ha iniciado una investigación para averiguar cómo es posible que hayan distribuido código tan inestable a los usuarios. Estas actualizaciones ya no están disponibles y es de esperar que vuelvan a estarlo cuando se hayan solucionado sus bugs.

¿Es este un indicativo de que en Microsoft están pensando en otras cosas? Es un grave problema en la cadena de producción que código inestable acabe en los ordenadores de usuarios de todo el mundo, así que me atrevo a apostar a que algún encargado se va a llevar una reprimenda o algo mas.

Fuente | Ars Technica