El youtuber Colin Furze quiso demostrar que se puede fabricar una moto voladora, y vaya si lo ha conseguido.

Otra cosa es que sea recomendable seguir sus pasos, claro. Los cementerios están llenos de genios locos que consiguieron grandes proezas, y esta se lleva la palma.

Claro, que no es como si esta fuese la única locura que ha intentado Colin Furze. La última vez que hablamos de él en Omicrono, estaba disparando garfios con cuerda al más puro estilo Assassin’s Creed. ¿Qué ha estado haciendo durante este tiempo?

Pues probablemente su proyecto más loco hasta ahora, y estamos hablando de alguien que conectó el transformador de un microondas a un cuchillo para conseguir el pan tostado conforme lo cortaba. Se trata de nada menos que de una moto voladora, aunque probablemente la imagen que tienes en la mente no se parezca mucho al resultado final.

moto voladora 2

Es comprensible, hay que tener en cuenta que Furze se ha basado en herramientas y objetos que podemos conseguir con relativa facilidad. También hay que recordar que Furze tiene mucha inventiva y detalles de genialidad, pero no tiene ningún título de ingeniería ni tiene los conocimientos necesarios para crear una moto voladora de manera segura.

Cómo este youtuber consiguió fabricar una moto voladora

Y sin embargo, lo ha hecho. Bueno, lo de “segura” es un decir, porque la moto ni siquiera tiene asiento, y el vídeo de presentación demuestra que es cuestión de tiempo que te pase algo cuando vas montado en ella. Pero funciona, es lo importante, ¿o no?

El proyecto empezó el 6 de abril, cuando Furze empezó a plantear los (brutos, inacabados) esquemas de su máquina voladora.

La idea básica es que necesitaba dos propulsores que empujasen la suficiente cantidad de aire como para levantar el peso del aparato y el del piloto. Hay que recalcar que muchos proyectos se quedan aquí, pero no este.

Furze optó por unir dos conjuntos de paramotores en una sola estructura, aunque no estaba muy seguro de cuántos kilogramos podría levantar de esa manera.

El resultado final ha sido presentado hoy, y es… ¿una locura? Claro, que no se qué esperaba. La moto no es capaz de alcanzar una gran altura, pero la verdad es que puede que sea mejor así. Aunque Furze ha añadido algunas protecciones transparentes, no me quiero ni imaginar lo que podría pasar si perdiese el equilibrio y se le cayese el aparato encima.

Y eso es lo más fácil del mundo, ya que los controles se reducen a mover el cuerpo para apuntar a la dirección que queremos ir. En definitiva, por lo que más quieras, no construyas y te montes en algo similar.

La era en la que podemos crear motos voladoras en nuestro garaje aún no ha llegado del todo.