Los números de las pistas de aeropuertos tienen un significado, más allá del evidente.

Es probable que los hayas visto alguna vez, si no en persona, en fotografías. Enormes números, visibles claramente desde grandes alturas puestos ahí para que los pilotos puedan identificar la pista en la que tienen que aterrizar sin necesidad de dispositivos especiales.

Aunque hoy en día la aviación comercial está muy automatizada y hay herramientas muy útiles que indican al piloto lo que tiene que hacer, hay que seguir manteniendo algo tan simple como dibujar números en el suelo. Curioso, ¿verdad? Más curioso aún es que los números tienen un motivo muy especial detrás.

 El secreto detrás de los números de las pistas de aeropuertos

¿Alguna vez te habías fijado que estos números no parecen tener un orden concreto? Es decir, si el aeropuerto tiene dos pistas, lo lógico sería que una pista estuviese marcada como “1”, y otra estuviese marcada como “2”, ¿verdad?. Sin embargo, probablemente hayas visto números muy diferentes, como “24” o “09”, incluso aunque el aeropuerto sólo tenga una pista.

aeropuerto pista 1

¿Cuál es el motivo de esos números que parecen aleatorios? Pues resulta que en realidad no son aleatorios, sino que están puestos ahí por un motivo.

Resulta que esos números representan la separación de la pista respecto al norte magnético en grados, redondeada al decimal más cercano. Es decir, que si el número de la pista es “24”, entonces esa pista tiene una separación de 240 grados aproximadamente respecto al polo norte magnético; si es “09”, tiene una separación de 90 grados aproximadamente respecto al norte magnético.

aterrizaje-avion-noche

¿Por qué es importante saber esto? Pues por varias razones, pero la principal es para no perderse. Al piloto que está a punto de salir del aeropuerto le interesa saber hacia dónde se estará dirigiendo una vez complete el despegue, para tener una referencia para el viaje.

aeropuerto pista 3

Y para el que aterriza, le interesa saber si la pista está en el ángulo apropiado respecto al norte para no confundirse de pista. En ambos casos, el piloto sólo necesita una brújula para saber que va en la dirección adecuada, ningún aparato más.

Es un detalle que parece menor, pero que está muy cuidado por los aeropuertos. El polo norte magnético cambia constantemente, aproximadamente un grado cada año, así que cada cierto tiempo el personal tiene que repintar los números con el nuevo grado de separación, para asegurarse de que ofrecen la información correcta a los pilotos.