El antivirus de origen ruso quiere recuperar su buena imagen, clientes y partners.
Kaspersky es una compañía de seguridad rusa, muy conocida por sus antivirus para Windows, macOS y Android. Pero también es conocida por muchos otros usuarios como el antivirus que ha estado espiando a sus propios clientes americanos. No obstante, esto último no del todo cierto, y eso es precisamente lo que quieren conseguir: lavar su imagen.
Concretamente, lo que ha ocurrido con los clientes americanos es que el gobierno ruso había estado inyectando código en el antivirus para espiar al gobierno americano, pues este usa (mejor dicho, usaba) el antivirus ruso. Por supuesto, la empresa desarrolladora no estaría al tanto. Kaspersky ha negado el hecho de que tuviera una puerta trasera del gobierno ruso, tal y como se rumoreaba durante muchos años.
Pero finalmente, de forma consciente o no, ha sido así. Y ya hay precedentes en Rusia: aplicaciones han sido bloqueadas y otras están a punto de ser bloqueadas por no incluir una puerta trasera que permita al gobierno interceptar las comunicaciones, tal y como ocurre con Telegram, que aunque no ha sido bloqueada, ha estado a punto.
Kaspersky quiere recuperar su imagen, clientes y partners
El gobierno estadounidense ha instado a las instituciones gubernamentales a dejar de usar el antivirus ruso antes de 90 días desde que se conocieron los hechos, y desde entonces la opinión pública ha descendido desmesuradamente. Por si no fuera poco, muchas tiendas estadounidenses retiraron sus productos.
Por último, tenemos que sumar que su CEO estudió en una escuela de criptografía relacionada con la KGB, además de que trabajó para el servicio de inteligencia militar ruso, lo cual es carne de cañón para que la comunidad de Internet comience a desarrollar teorías.
Simplemente habían pasado de ser uno de los mejores antivirus a ser el antivirus hackeado por el gobierno ruso, en el mejor de los casos, y el antivirus que colabora con el gobierno ruso, en el peor, muy parecido a como ha quedado CCleaner después de que un grupo de hackers inyectaran código maligno dentro de su programa.
El programa de transparencia de Kaspersky tendrá lugar en 2018
Ahora, han abierto un programa de transparencia para que cualquiera pueda analizar su código fuente, tanto en busca de bugs como en busca de vulnerabilidades y código inyectado. Y para ello, está ofreciendo hasta 100 000 dólares por cada uno de los fallos encontrados. Antes del inicio de este programa, la cifra tan solo llegaba a los 5000 dólares por fallo.
La comunidad no solo podrá revisar en busca de errores y de cualquier incidencia el código fuente, sino también cualquier actualización y las reglas de detección de amenazas. Literalmente, quieren demostrar que «la empresa aborda cualquier problema de seguridad de manera rápida y completa».
La fase inicial de este programa, donde se liberará el código fuente, tendrá inicio en el primer trimestre de 2018. También abrirán 3 centros de transparencia en Asia, Europa y Estados Unidos para 2020. Con todo ello pretenden recuperar viejos clientes, ganar nuevos, y hacerse con nuevos partners, además de su imagen.