Investigadores de Facebook han publicado un estudio en el que detallan la creación de una red social simulada, compuesta únicamente por bots y que ha estado funcionando en secreto para su estudio.
Esta red social es básicamente el mismo Facebook que cualquiera puede usar, pero a una escala menor; además, está completamente cerrada al mundo exterior, por lo que no puede recibir influencias externas y funciona de manera autónoma.
Dentro de esta red social no hay personas, sino algoritmos. Programas que generan contenido y reaccionan ante él de manera automática; pero eso no significa que sea algo aburrido, por lo que indica el estudio. Poner a bots hablando entre sí suena a una pérdida de tiempo tremenda, pero puede ayudar a mejorar la plataforma de Facebook.
El Facebook sólo para bots
Facebook no ha creado una red social oculta sólo porque puede. El objetivo era simular el funcionamiento de una red social a una menor escala, para poder estudiarla mejor y sacar conclusiones de cómo los humanos las usamos.
Es por eso que en esta red social no todos los bots eran iguales. Había algunos diseñados con intenciones maliciosas, como los especializados en robar información privada de otros bots. En otras palabras, lo mismo que sufren los usuarios reales de Facebook.
Otro tipo de bot era el "scammer", que se dedicaba a conectar con otros bots para intentar convencerles de que tomasen decisiones que resultarían perjudiciales a largo plazo; es lo mismo que hacen los que intentan engañarnos en Facebook para comprar productos falsos y llevarse nuestro dinero, por ejemplo.
De hecho, Facebook ha metido en esta plataforma secreta a lo peor que podemos encontrar en la pública; también había bots que intentaban buscar los límites de las reglas de Facebook, publicando contenido que podría ser prohibido en la red social real.
Pero la plataforma no estaba sólo dispuesta de bots "malos"; la mayoría eran bots que simulaban el comportamiento de los usuarios normales, visitando páginas webs, pulsando en enlaces, y enviando solicitudes de amistad a otros bots. De hecho, estos bots también podían acceder a contenido real de Facebook, pero sólo si era público. Al estar basado en el mismo código, este comportamiento es fácilmente rastreable y reproducible.
Una red social virtual
El objetivo inicial de este proyecto es encontrar bugs en Facebook; es posible crear nuevas plataformas con las novedades implementadas por Facebook antes de que lleguen a los usuarios reales, y comprobar si hay algún problema. Si los bots consiguen aprovecharse de una vulnerabilidad o un error, es probable que los humanos también puedan.
A largo plazo, Facebook quiere mantener una red social paralela a la ocupada por usuarios reales, aunque los investigadores advierten de que siempre debería permanecer aislada de la red social real. Un mundo virtual, desconectado del real.