WhatsApp, como la aplicación de mensajería más importante de España, es el centro del universo de nuestro smartphone. Algunas decenas -en el más liviano de los casos- de los miles de millones de mensajes que pasan por los servidores de la app de mensajería acaban en nuestros teléfonos a diario posicionándola también como la primera en número de descargas en todo el mundo.
Sin arriesgar mucho se puede decir que es la primera, y en ocasiones la única, aplicación que se descarga nada más comprar un nuevo smartphone. Afecta a tantos millones de personas que cada cambio por pequeño que sea se estudia al milímetro para que afecte lo menos posible a la experiencia de usuario; a la par que se van añadiendo nuevas funciones y novedades. Lejos quedan ya aquellos años donde tan solo era una app de mensajería que sustituía a los SMS. Facebook la compró y desde entonces se ha convertido en una red social más del ecosistema, con sus estados, sus stories, con una aplicación de fotos bastante buena... Y todo gracias a las versiones beta.
Lanzar un programa de betas es una de las mejores formas de probar un software antes de su comercialización. Desde videojuegos a sistemas operativos completos como macOS Big Sur, pasando también por WhatsApp. Son versiones preliminares que no están listas para el público general pero sí para un número más o menos grande de usuarios que han decidido sacrificar rendimiento y estabilidad a cambio de probar las novedades antes que nadie. Los desarrolladores obtienen una telemetría valiosísima de miles de usuarios de todo el mundo y la utilizan para arreglar posibles fallos antes del lanzamiento mundial.
WhatsApp Beta para Android
El sistema operativo de Google es el que más millones de usuarios acapara en España y en todo el mundo. La inmensa variedad de smartphones y, en la mayoría de los cosos, más económicos que los firmados por Apple los convierten en la elección preferida. Y, cómo no, tienen su particular programa de versiones betas de WhatsApp.
Se puede acceder a WhatsApp Messenger (Beta) para Android, como se llama oficialmente, a través de la tienda de aplicaciones Play Store. Los desarrolladores suben ahí estas versiones con novedades y, de vez en cuando, abren la lista para que más usuarios puedan apuntarse. El programa beta, al cierre de este artículo, se encuentra cerrado a la incorporación a nuevos usuarios, pero los pasos a seguir son muy simples.
En este enlace a la Play Store accedemos a la página de la beta y, si están abiertas las inscripciones aparecerá un botón por el que aceptamos los términos del programa y seguidamente nos conducirá a la descarga de WhatsApp Beta. Cabe recalcar que el funcionamiento puede no ser el esperado con cierres fortuitos e incluso funciones importantes que dejan de funcionar.
Si conseguimos entrar en el programa la aplicación se actualizará con una mayor frecuencia con nuevas funciones. La mayoría serán pequeños cambios pero en ocasiones más específicas se implementan algunas como el modo oscuro o los próximos pagos mediante WhatsApp que presumiblemente llegarán en el futuro.
WhatsApp beta para iOS
El sistema operativo móvil de Apple también tiene su particular beta de WhatsApp. Al igual que su 'hermana' de Android, en el momento de escribir estas líneas se mantenía cerrada a cal y canto a la incorporación de nuevos usuarios bloqueada. Además, el proceso para obtener las funciones de WhatsApp antes que nadie es algo más complejo en este caso.
Lo primero que hay que hacer es descargarse la app TestFlight como la puerta a las versiones beta de las apps que tienen habilitado este modo de prueba. Una vez instalada, TestFlight solicitará algunos permisos especiales que hay que aceptar para poder pasar al siguiente paso.
WhatsApp Beta para iOS tiene un apartado propio dentro de TestFlight al que se puede acceder y comprobar la disponibilidad de acceso. Si hay huecos libres dejará acceder a la página de la beta en la AppStore, desde donde se puede descargar WhatsApp Beta sin mayores complicaciones. Al igual que en Android, este tipo de versiones en iOS también pueden acarrear problemas de estabilidad o mal funcionamiento generalizado. Eso sí, reciben las nuevas funciones antes que nadie.