La Oficina Federal para la Seguridad Informática (BSI) ha recomendado evitar el uso del antivirus de la empresa rusa Kaspersky y utilizar productos alternativos ante el considerable riesgo de un ciberataque informático por parte de las autoridades rusas.

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"El proceder de las fuerzas militares y/o de inteligencia de Rusia, así como las amenazas expresadas por la parte rusa en el curso del actual conflicto bélico contra la UE, la OTAN y Alemania están asociados con un riesgo considerable de un exitoso ataque informático", advierte la BSI en un comunicado.

Un fabricante ruso de tecnologías de la información "puede llevar a cabo por sí mismo operaciones ofensivas, verse obligado, en contra de su voluntad, a atacar sistemas de destino, ser espiado sin su conocimiento como víctima de una operación cibernética o ser utilizado indebidamente como herramienta para ataques contra sus propios clientes", argumenta.

Alternativas a Kaspersky

Los mismos usuarios pueden verse afectados por estas operaciones, agrega la BSI, que subraya que sobre todo las empresas y autoridades con intereses especiales de seguridad, así como los operadores de infraestructuras críticas pueden estar amenazados.

Antivirus Kaspersky

La autoridad alemana de ciberseguridad recomienda a las empresas y otras organizaciones planificar cuidadosamente y llevar a cabo la sustitución de elementos esenciales de su infraestructura de seguridad informática. Desconectar sin preparativo alguno los productos de seguridad informática y en particular los programas antivirus implicaría la posible exposición sin protección alguna a ataques desde internet, advierte la BSI.

Cambiar a otros productos va asociado a una pérdida temporal de comodidad, funcionalidad y seguridad, reconoce la autoridad de ciberseguridad, que recomienda realizar una evaluación individual y sopesar la situación actual y, en caso necesario, dejarse asesorar por proveedores de servicios de seguridad informática certificados por la BSI.

Kaspersky

La autoridad alemana de ciberseguridad, por su parte, ofrece asesoramiento a los afectados, que también pueden pedir asistencia a otras autoridades competentes. No es la primera vez que ocurre esto. En 2017, el por entonces presidente de los Estados Unidos vetó el uso del software de la compañía responsable de Kaspersky en su ejecutivo por considerar que estaba ligada al Kremlin. Algo que evidentemente ha rechazado la compañía anteriormente.

Respuesta de Kaspersky

La compañía, en su blog, ha respondido a la advertencia del BSI. Aseguran que esta decisión "no está basada en una evaluación técnica de los productos de Kaspersky" y que proviene de "motivos políticos". Se prestan a trabajar con el BSI para "clarificar todos los puntos necesarios" que han motivado la decisión del BSI y "de otros reguladores".

Abogan por el "diálogo pacífico" como único instrumento para resolver conflictos, expresando que "la guerra no es buena para nadie". Además, recuerdan que la empresa ha reubicado su infraestructura de procesamiento de datos "en Suiza", país en el que según la compañía se procesan "los archivos maliciosos y sospechosos compartidos voluntariamente por los usuarios de productos Kaspersky en Europa".

La advertencia del BSI se suma a la ofensiva de la Unión Europea ante empresas y medios de comunicación rusos. En las últimas semanas, tanto la UE como otras empresas como Google han prohibido la emisión de RT y de Sputnik en Europa, dos de los principales canales de telecomunicaciones de Rusia ligados al Kremlin. Además, otros servicios como Spotify o Twitter han abandonado el país ante la censura de otras plataformas por parte de Putin.

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