Uno de los nombres más importantes en lo que a software se refiere, Microsoft Office, dejará de estar presente en nuestras vidas. Un software tremendamente usado en España y en el resto del mundo que ahora cambiará de nombre y de estilo, pasando a llamarse Microsoft 365. Lo que antes era una única compra, ahora pasará a ser un servicio de suscripción.
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Según ha anunciado Microsoft, tanto la web de Office como sus aplicaciones cambiarán de nombre y dirán adiós al sobrenombre Office. Pasarán todas a llamarse Microsoft 365, y aunque no hay grandísimos cambios respecto al modelo anterior en cuanto a uso e interfaz, los principales son referentes al modelo de monetización y a las ventajas que este da.
De esta forma, el nombre que se dio por primera vez en la década de los años 90 pasa a actualizarse con un nombre mucho más moderno. Ahora, la que antes era Office pasará a ser como un centro de aplicaciones y archivos en el ecosistema Microsoft 365, algo muy parecido a lo que hacen rivales como Adobe y su Creative Cloud.
Adiós a Microsoft Office
La compañía ha querido tranquilizar a los usuarios, asegurando que los cambios serán mínimos. Explican que "no habrá ningún impacto" o cambio en las cuentas, perfiles o archivos existentes. "La aplicación se actualizará con un nuevo icono y nombre", que se implementarán en noviembre.
Primero, cambiará la página web y su dominio, y en enero del año que viene, lo harán las aplicaciones tanto de Windows como de smartphones y tablets. Esta aplicación, como ya era Office, "sirve como centro para todas las aplicaciones de productividad que ofrece Microsoft 365 y brinda una experiencia simple pero poderosa", asegura Jared Spataro, vicepresidente corporativo de trabajo de Microsoft.
Mensaje de cambio de Office a 365.
Este centro permitirá aunar tanto las aplicaciones como los archivos del ecosistema Microsoft 365, ya sean Powerpoint o Word. Por supuesto, integrará todas las funciones de trabajo colaborativo de Microsoft ya embebidas en Word, como la capacidad de mantener un sistema de acceso a otros usuarios para los archivos del hub de Microsoft 365.
El cambio más notorio que pasa por el cambio de nombre también incluye la suscripción mensual. Al igual que hacen otras empresas como Adobe, Microsoft abandona la compra única para adoptar el sistema de suscripción por mensualidades. Más allá de, por supuesto, renunciar a 31 años de renombre y dominio en el sector de la ofimática.
De esta forma, los usuarios que quieran acceder a todas las prestaciones de Microsoft 365, tendrán que pagar una cuota mensual. Eso sí, no obligará a los usuarios a pasar por esta suscripción si quieren aplicaciones sueltas; si el usuario solo quiere alguna aplicación dentro del hub como Word, podrá comprarla de forma única. Además, llegarán nuevas plantillas, módulos y herramientas de trabajo organizativo.