No es un misterio que la nefasta gestión de Elon Musk de la ya extinta Twitter en España y en el resto del mundo ha generado todo tipo de competidores. Y no solo eso; la irrupción de la inteligencia artificial ha causado que muchas otras empresas deseen un trozo del pastel, presentando un buen plantel de alternativas en herramientas de IA. Un nuevo competidor irrumpe con estos dos planes bajo el brazo y se llama Pebble.
O al menos, este es su nuevo nombre, ya que anteriormente se llamaba T2. Esta red social que también se basa en el micro-blogging para lanzar ideas no solo ha llevado a cabo un cambio de nombre drástico, sino que ha incluido la posibilidad de que la plataforma escriba mensajes basadas en IA, o respuestas inspiradas en su actividad.
Lo que busca Pebble con esto es que el usuario que no sepa qué escribir simplemente clique un botón y sea la IA la que escriba el mensaje. Debido a que es tremendamente sencillo revisar el mensaje y editarlo, el usuario puede modificarlo a placer para quitarle todos los errores y publicarlo, facilitando mucho el proceso. Unas sugerencias que hacen uso de GPT-3.5 como modelo principal.
Un Twitter con IA
Pebble se ha dispuesto a enfrentarse a X con todas sus armas. De base, esta era una red social que únicamente funcionaba con invitación, tal y como ocurre ahora con BlueSky. Solo era posible registrarse si la propia Pebble lanzaba invitación. Ahora, cualquier persona que tenga una cuenta en X (anteriormente Twitter) se podrá registrar gratis en Pebble.
Hablamos de una startup increíblemente pequeña. Según WIRED, esta empresa cuenta con cuatro empleados, unos pocos contratistas y una ronda de financiación de 1,4 millones de dólares. Su CEO, Gabor Cselle, ha sido el que ha dado a conocer estas novedades, entre las que se incluyen estas funciones de IA generativa.
Era de esperar que con la revolución de la IA las redes sociales ofrecieran sugerencias de publicación basadas en inteligencia artificial. Pebble se convierte en una de las primeras junto a Meta y LinkedIn. La primera solo ofrece estas opciones para anunciantes y la segunda requiere de una serie de pasos para que el usuario las pueda aprovechar. Otros servicios que ya han empezado a ofrecer estas funciones incluyen Gmail u Outlook.
Lo que sugiere Pebble, nunca mejor dicho, son sugerencias completamente automáticas, basadas únicamente en las interacciones y publicaciones de los usuarios. También se sustentan sobre algunas plantillas que la propia Pebble tiene programadas, para cuando el algoritmo no sepa exactamente qué decir. Detalle importante: para mejorar estas sugerencias, Pebble pedirá al usuario que haga ciertas cosas, como publicar 10 posts y otras cuestiones.
Estas funciones de IA no se limitarán a las publicaciones. Pebble usará modelos como GPT-3.5 para revisar los nuevos registros de usuarios en la red social, comparando las biografías de las cuentas de X y las publicaciones recientes de usuarios con las pautas de comunidad de la plataforma. De esta forma, se rastreará, sobre todo, contenido violento y pornográfico, cerrando la puerta a que Pebble permita desnudos íntegros y similares.
Por si fuera poco, Pebble rastreará a los usuarios con otras fuentes para determinar no solo que son reales, sino que su contenido es veraz. Tampoco se permitirá el uso de estas sugerencias para atacar a otras personas; los usuarios que lo hagan serán bloqueados y revisados manualmente por operarios humanos.
De esta forma, y en palabras de Cselle, estas novedades buscarían que se publique y revise contenido muy variado, y que consiga que los usuarios interactúen más entre sí. Algo necesario, ya que cuenta con apenas 15.000 usuarios registrados, una fracción de lo que X tiene actualmente pese a los múltiples éxodos provocados por las políticas de Musk.
El problema de Pebble es que ahora tienen que enfrentarse a más rivales, como Spill, BlueSky o la más reciente, Threads de Instagram. A todo esto se le suma que la IA no es perfecta y tal y como se ha visto en el caso de Microsoft con Bing, los modelos que rigen la inteligencia artificial pueden resultar en mensajes dañinos, con sesgos y prejuicios sobre raza, género o sexo. Además, pueden ser tremendamente desinformativos u ofensivos.
Pebble asegura que sabe que estos problemas existen, y se limita a decir que los usuarios simplemente pueden ignorar estas sugerencias. "No queremos una situación en la que los robots se hagan pasar por humanos y que en toda la plataforma estén solo ellos hablando entre sí". Está por ver si Pebble conseguirá reunir a una buena base de usuarios para enfrentar a X, Threads o BlueSky.
Hay que recordar que estas sugerencias no solo se podrán llevar a cabo para publicar contenido, sino para responder a otras publicaciones de usuarios. Es decir, que la IA se encargará de 'cocinar' una respuesta en base a las publicaciones de otros. Cselle explica que el sistema aprenderá de los comentarios de los usuarios, de tal forma que las respuestas y sugerencias mejorarán sustancialmente con el tiempo.