Apple ha reforzado Safari centrándose en una de los pilares de su estrategia, la privacidad. Lo hace además hincando el diente a su principal competidor, Chrome, pues pone de ejemplo al navegador de Google —el más usado en España— como todo aquello que quiere erradicar con su software.
La ambición de Safari para que los usuarios compartan la menos información posible en el rastro de los usuarios no es nueva. En 2005 se convirtió en el primer navegador en comenzar a bloquear las cookies de terceros, y en 2019 se convirtió en el primero en bloquear todas las cookies de terceros. "Un hito que algunos de nuestros competidores aún no han alcanzado", en referencia directa a Chrome.
A esta renovación de Safari le acompaña una campaña de publicidad titulada "Mientras navegas, te espían", que llega unos meses después de que Google también publicitase la posibilidad de usar Chrome como navegador principal en los teléfonos iPhone, una vez se habían aplicado las medidas de la DMA.
Refuerza navegación privada
En concreto, la actualización de Safari incluye un sistema denominado Antirrastreo Inteligente para ir más allá del bloqueo de cookies. Usa el aprendizaje automático para saber qué dominios se emplean para rastrear al usuario y de inmediato aísla y purga los datos de rastreo en el dispositivo. Además, oculta la dirección IP de los rastreadores conocidos, evitando que pueda usarse para identificar al usuario en diferentes webs y sesiones. Esta funcionalidad de la privacidad está activado por defecto cuando se usa Safari y se gestiona desde Ajustes.
Con estas nuevas medidas, Apple quiere evitar que la llamada huella digital, con la que es posible identificar usuarios en base a características muy concretas como la configuración del sistema, la resolución de la pantalla o los tipos de letra. "Para evitarlo Safari presenta una versión simplificada de la configuración del sistema a los rastreadores para que varios dispositivos parezcan idénticos, de modo que resulta más difícil aislar a uno de ellos. Muchos de nuestros competidores no han llegado tan lejos", explica Apple a través de un comunicado.
Apple también ha reforzado la navegación privada, si hasta ahora la navegación privada no guarda las páginas web visitadas, las búsquedas hechas o los datos de autorrelleno ahora han reforzado estas protecciones usando Face ID y Touch ID, de modo que la protección se reactiva cuando no se está usando, así que el usuario puede dejar las pestañas abiertas aunque se aleje del ordenador. Sin embargo, la empresa asegura que "ahora ofrecemos protecciones más agresivas contra los rastreadores".
Entre ellas destaca la protección frente al rastreo de enlaces, que eliminará los rastreadores incluidos en las URL que se comparten a través de Mensajes o correo electrónico. "Y, por supuesto, también funciona cuando usas la navegación privada en Safari".
Además, en cuanto al sistema de búsqueda, los usuarios tienen la opción de seleccionar un motor de búsqueda como predeterminado en la navegación privada distinto del de la navegación estándar. "Esto da a los usuarios más opciones de personalizar su experiencia".
Contra el rastreo de ubicación
Otro de los puntos donde Apple ha puesto el acento es en proteger los datos de ubicación. Para hacerlo, empieza directamente con el sistema de búsqueda, impidiendo que compartir directamente la localización con el buscador, como sí sucede en Google y Chrome. "Safari no funciona así, porque no comparte datos de ubicación con tu motor de búsqueda", expone la compañía de Cupertino.
Aún así, el usuario podrá compartir su ubicación, pues es interesante para casos concretos como restaurantes o reservas. En estas ocasiones Safari entenderá que el lugar de ubicación aporta valor y preguntará directamente al usuario si quiere compartir los datos o no, al tiempo que podrá establecer permisos diarios, lo que limita el tiempo que una web puede seguir la ubicación del usuario.
Otra de las utilidades que se pueden disponer en el nuevo Safari son las extensiones para personalizar la experiencia de usuario. "Hemos ido mucho más allá que otros navegadores a la hora de instaurar protecciones en las extensiones", explica Apple, ya que argumenta que existen muchas extensiones con acceso a lo que ocurre en tu navegador, como qué aparece en tu pantalla o lo que escribes. Ahora con Safari, los usuarios tendrán capacidad de ver la información a la que la extensión puede acceder antes de activarla, y pueden restringir el acceso de una extensión a únicamente un día o a webs concretas.