Una breve caminata después de cada comida puede prevenir la diabetes tipo 2
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Son numerosos los artículos de Medciencia en los que se ha hablado sobre los grandes beneficios del ejercicio para prevenir enfermedades cardiovasculares y la diabetes tipo 2 entre otras. Ahora, un nuevo estudio publicado en Diabetes Care por los investigadores de la Escuela de Salud Pública y Servicios de Salud (SPHHS, por sus siglas en inglés) de la Universidad George Washington (EEUU) se ha centrado en cuáles son los mejores momentos del día para realizar ejercicio monitorizando los niveles de azúcar en sangre para observar en qué momento se reducen en mayor cantidad. Cabe destacar que en las personas mayores se produce una mayor elevación de azúcar en sangre tras las comidas debido a que presentan mayor resistencia a la insulina y una secreción de insulina lenta o disminuida, por lo que el estudio se encamina fundamentalmente a este grupo de población.
En el estudio participaron diez personas de 60 años o más que, aunque estaban sanos, presentaban riesgo de desarrollar diabetes tipo 2 por baja actividad física y altos niveles de azúcar en sangre. A esta última condición se le denomina prediabetes, la cual es muy prevalente e ignorada por la mayor parte de la población. Como ejemplo, se estima que en EEUU hay 79 millones de personas con prediabetes sin que la mayoría de ellos lo sepa. A los participantes se les realizaron tres protocolos de ejercicios ordenados aleatoriamente espaciados en cuatro semanas, tomaron comidas estandarizadas y se midieron sus niveles de azúcar en sangre cada 48 horas.
Tras completar el estudio, se llegaron a dos conclusiones: una caminata corta después de cada comida, de una duración aproximada de 15 minutos, es igual de efectivo para reducir los niveles de azúcar en sangre que caminar 45 minutos a un ritmo entre suave y moderado; la caminata realizada después de la cena es la más efectiva. Hay que destacar que la cena es la comida del día que más sube los niveles de azúcar debido a que se ingiere una gran cantidad de comida que posteriormente se reposa, lo cual supone un importante riesgo para padecer la diabetes tipo 2. Es por ello que una breve caminata después de cenar puede producir tan buenos resultados para prevenir esta enfermedad.
Loretta Dipietro, autora principal del estudio y directora del Departamento de Ciencias del Ejercicio de SPHHS, ha destacado la mala costumbre de reposar la comida durante la tarde o tras la cena echando una siesta o viendo la televisión:
“Eso es lo peor que puede hacer. Se debe digerir un poco la comida y luego salir y moverse”
Conclusiones
De confirmarse estos resultados con otros estudios, esta nueva estrategia para prevenir la diabetes tipo 2 podría ser clave para aquellas personas que sean prediabéticas. Además de que el esfuerzo requerido es mínimo, con estas caminatas se evitan las elevaciones de azúcar en sangre tras las comidas en personas mayores que supone un factor determinante para padecer la diabetes tipo 2.
“Estos resultados son una buena noticia para las personas de 70 y 80 años que pueden sentirse más capaces de participar en la actividad física intermitente a diario, sobre todo si las caminatas cortas se pueden combinar con recados o pasear al perro”, concluyó Dipietro.
Asimismo, el estudio también destaca la gran importancia que supone una caminata cronometrada tras una gran comida por la noche, poniendo en el punto de mira la mala costumbre de reposar la cena viendo la televisión.
Fuente: Europa Press