¿Eres un buscador de sensaciones?
A veces no sabemos que nos diferencia de los demás, ¿Te ha ocurrido alguna vez que encuentras a la gente aburrida? probablemente sea porque tú requieres de un nivel de activación o estimulación a tu alrededor más alto que ellos y la monotonía y la rutina te aburren. Tal vez seas un buscador de sensaciones… Sin duda el que lo sea no tendrá problemas en identificarse con este artículo.
Definición:
El concepto de SS (Sensation seeking) o buscadores de sensaciones fue desarrollado por Zuckerman (1979), se considera un rasgo de personalidad como lo pueden ser la extroversión, el neuroticismo, etc… Se define como una necesidad de estar en situaciones estimulantes (como peligrosas o de riesgo), que sean variadas y complejas (no monótonas). Literalmente significaría una búsqueda activa de estimulación externa que maximice las sensaciones, por placer. La valoración del riesgo es un rasgo diferencial entre los buscadores de sensaciones y aquellos que no lo son (que evalúan como mayor la probabilidad de consecuencias negativas). Además el buscador de sensaciones se decantará por sensaciones inusuales. Por lo general los hombres suelen tener mayores puntuaciones en esta escala. Además correlaciona negativamente con la edad, es decir, esta dimensión suele disminuir con la edad (teniendo un mayor pico en la adolescencia y la juventud). Son personas que sienten atracción hacia lo desconocido y hacia las emociones fuertes.
Para estos sujetos el riesgo implica una recompensa, una sensación placentera. Los buscadores de sensaciones incurren en un “sesgo optimista” al infravalorar la probabilidad de consecuencias negativas e infravalorar los riesgos reales implicados en las conductas.
Se ha asociado mucho este rasgo a la impulsividad. De hecho Zuckerman posteriormente reformuló su teoría para incluir un rasgo superior denominado Búsqueda Impulsividad de Sensaciones, y que englobaría dentro y por separado (aunque asociadas) la impulsividad y la búsqueda de sensaciones como dos subgrupos. Según Zuckerman comparten un sustrato biológico común y predicen el mismo tipo de conductas.
Zuckerman inventó una escala (Escala de Búsqueda de Sensaciones Forma V, 1978) para medir este rasgo, en las últimas dos páginas de este trabajo podéis encontrar la escala
Conductas típicas de los buscadores de sensaciones:
– Consumo de drogas y/o estimulantes.
– Deportes de riesgo extremos.
– Viajes a lugares exóticos.
– Toman riesgos innecesarios.
– Conducen rápido.
– Escuchan la música muy alta.
– Inicio de las relaciones sexuales más precoz.
– Elegirán o se sentirán más cómodos en profesiones con cierto riesgo (corredores de bolsa, pilotos de carreras).
– Apuestan, beben y se arriesgan más que otros sujetos.
– Tienen más probabilidad de cometer actos delictivos o incurrir en promiscuidad sexual (y conductas sexuales de riesgo).
– Los hábitos alimentarios serán más variados, habrá más comidas picantes u exóticas, etc…
Así los buscadores de sensaciones evitaran a personas predecibles, asignaciones de trabajo rutinarias y experiencias redundantes. Además se ha observado que estos sujetos presentan mayor tolerancia al dolor, a los ruidos fuertes y a los estímulos novedosos. Suelen ser personas extrovertidas y creativas.
Riesgos:
Es curioso pues aquí tenemos dos caras de una moneda. Por un lado estos sujetos tendrían una probabilidad más alta de sufrir lesiones, accidentes, etc… pues se exponen más frecuentemente a situaciones de riesgo que el resto, incrementando sus probabilidades de un daño debido a esa exposición. Pero lo curioso es que dado que estas personas se sienten cómodas en estas situaciones es más probable que salgan airosas de ellas en comparación con sujetos con un bajo rasgo de búsqueda de sensaciones, esto se debe a que los no buscadores de sensaciones presentarán una mayor ansiedad que bloqueará sus patrones de respuesta o detonará conductas menos acertadas para la situación, mientras que los buscadores de sensaciones a menudo dan lo mejor de sí mismos en estas situaciones, sacan el máximo rendimiento cuando son expuestos a sus límites.
Este es un rasgo de personalidad que implica mayor riesgo físico pues se asocia a conductas que ponen en peligro la vida pero además este rasgo de personalidad es un factor de riesgo para otro tipo de problemas ya más psicológicos (aparte de estar asociado a la impulsividad). Frecuentemente se ha encontrado una mayor tendencia al consumo de drogas (y por tal a la probabilidad de abuso o dependencia), a los trastornos de personalidad como el límite, histriónico o antisocial, el suicidio en adolescentes, el alcoholismo, etc…
Frank Farley decía que estos rasgos de personalidad, bien orientados pueden ser muy positivos (Si encauzan su capacidad y deseo hacía metas vitales productivas que la desgasten) pero si estos sentimientos no tienen vía de escape pueden fácilmente caer en la delincuencia, o conductas que deterioren la vida y salud de la persona, de ahí el riesgo.
Lo importante es que uno sepa de qué pata cojea. Sabiendo que si somos así hay riesgo de caer en actividades algo problemáticas si no dejamos salir esa necesidad de novedad, lo que podemos hacer es de forma previsora incluir en nuestra vida actividades positivas que la potencien, por ejemplo los deportes (en lugar del consumo de drogas), los viajes (en lugar de la promiscuidad), etc… ¡Más vale prevenir que curar!
Biología:
Eysenck y Zuuckerman lo consideraron un rasgo hereditario ligado al temperamento. Se sabe que los sujetos con elevada búsqueda de sensaciones tienen una baja activación cortical crónica de base. Se demuestra un nivel bajo de MAO (Monoaminaoxidasas) heredado comparado con los sujetos con una baja puntuación en el rasgo de búsqueda de sensaciones. Esta encima se encarga del metabolismo de los neurotransmisores cerebrales (involucrados en el humor, la excitación y la recompensa). Estos sujetos presentan respuestas de orientación intensas y bajas respuestas de defensa. En concreto una baja MAO-B que regula a su vez los niveles de dopamina asociados a las sensaciones de placer, se han encontrado bajo también en aquellas personas con problemas de control de los impulsos.
Se considera que si bien hay cierta heredabilidad del rasgo, también hay un factor de socialización importante, sobre todo en el tipo de conductas por las que se decante la persona (de ahí la importancia de reorientar a estos sujetos hacia actividades lo más positivas posibles). Hay estudios que lo asocian al cromosoma 11 y otros estudios recientes lo asocian con el gen -DRD4, concretamente poseer este gen aumentaría la probabilidad de desarrollar rasgos de personalidad de buscadores de sensaciones en la adultez.
Además se cree que cognitivamente los buscadores de sensaciones responden mejor y más rápido a tareas atencionales con estímulos complejos, y presentan mejor atención focalizada o selectiva. Al entender las situaciones de estrés como un desafío son capaces de responder mejor a estas y con menos ansiedad.
Hay un vídeo que explica muy bien este rasgo y los factores a investigar en un futuro:
Fuente: Psicothema, Saludisima, Cat-Barcelona, Pepsic.
Imagen: Wikimedia Commons.