Consejos para convertir el momento de hacer los deberes en algo positivo

1. Elegir un lugar fijo: Los deberes no se pueden hacer en la cocina, en el salón, con la tele de fondo, la madre o padre hablando por teléfono o cocinando… Hay que elegir un sitio fijo donde no existan tantos distractores. Un sitio con silencio, en el que el niño se sienta cómodo, puede ser un escritorio que él mismo haya elegido o decorado.

2. Programación: Cuando se eligen las actividades extraescolares también se tiene que elaborar un cuadro organizando los horarios, para que haya tiempo para todo, y no hacer los deberes en “huecos” libres o después de actividades extraescolares de las que el niño llega agotado. El niño tiene que tener también alguna tarde libre destinada a jugar en casa y estudiar.

3. Los deberes NO los hacen las mamás y papás: Si los deberes los acaban haciendo los padres el niño ni aprende ni adquiere disciplina, en estos casos pedimos sobre todo sentido común, los deberes son para los niños.

4. No gritos, No amenazas, No compares: Recuerda siempre los “3-NO” a la hora de los deberes las tres cosas que los padres JAMÁS tienen que hacer. Los gritos, amenazas y comparaciones solo consiguen humillar al niño.

5.  Marcar tiempos: Sentar al niño en una silla y decirle “no te mueves hasta que acabes” es una pesadilla, es mejor marcar tiempos, poner alarmas, que el niño pueda tener 5 minutos de descanso y así el niño no relacionará deberes con tortura.

6. Premiarle por el esfuerzo: Premia su dedicación, el que haya cumplido con sus deberes, y hazlo con actividades juntos el fin de semana, ir al parque, al cine, a cenar pizza…

7. Los deberes los tiene que hacer solo: No estés encima suya, tú solo tienes que corregirlos y/o explicar algo que no entienda, no estar a su lado inspeccionando cada movimiento y cada distracción. Además, lo más recomendable es que los deberes los corrijáis juntos.

8. Plantear metas: De forma gráfica y visible haced juntos un cuadro de metas a corto plazo que el niño tenga que conseguir y debes motivarle para que llegue hacia ella.

9. El niño necesita que le des ánimo: Al igual que los adultos cuando estamos ante retos importantes y necesitamos animo y apoyo los niños también. No dejes de animarle, de decirle lo contenta/o que estás por su esfuerzo y que cuando hay esfuerzo siempre habrá una recompensa.

10. Técnicas de estudio: Son importantes, los niños necesitan técnicas de estudio y estas no suelen trabajarse del todo en las clases. por ejemplo, sugiere estrategias como utilizar tarjetas nemotécnicas para memorizar datos, tomar apuntes, hacer resúmenes y subrayar lo más importante mientras lee.

11. El “bendito” ejemplo: Los niños aprenden de lo que observan, si ven que su padres también tienen su momento para hacer sus deberes por ejemplo de inglés, que también tienen su tiempo para leer o escribir. Ver a sus padres también hacer deberes es una motivación extra para los pequeños de la casa.

12. Hablar de los deberes de forma positiva: Recordad que la clave está en que el niño sienta este momento como agradable, en lugar de hablar de los deberes de forma negativa y que los niños crean que es un castigo, es adecuado que cuando se hable de los deberes sea de una forma positiva.

Resumiendo, crear ciertas rutinas y entornos favorables, acompañar y alentar a los niños mientras realizan las tareas y revisarlas junto a ellos cuando han terminado serían las principales premisas para convertir el momento de los deberes en algo agradable.