El desafío de aterrizar un cohete espacial con 10 metros de margen
El próximo lanzamiento de SpaceX intentará hacer que el cohete usado vuelva a aterrizar, en una pequeña plataforma.
29 diciembre, 2014 19:35Noticias relacionadas
- India lanza la misión que le puede convertir en el cuarto país en llegar a la Luna
- Tu nuevo fondo de pantalla ha sido posible gracias a una vela solar
- Duro como una piedra o blando como la gelatina: este material dinámico cambia con la iluminación
- Esta lengua electrónica puede "probar" y analizar líquidos en solo un minuto
Uno de los principales motivos por los que la exploración espacial es cara es que no hay muchas cosas que se puedan reutilizar después de un lanzamiento. La cápsula en la que van los astronautas o la carga suele aguantar varios viajes, pero en lo que respecta a los cohetes la cosa cambia.
Un cohete espacial reutilizable
Por eso ese es uno de los desafíos que se ha impuesto SpaceX, la empresa de Elon Musk que pretende liderar el creciente sector espacial ahora que las agencias espaciales tienen cada vez menos presupuesto. Después de muchas pruebas en las que se han probado nuevas adiciones a los cohetes para mejorar su estabilidad, finalmente el sistema se pondrá a prueba en una misión real, cuando entre el 6 y el 7 de Enero se lance una carga hacia la Estación Espacial Internacional.
El cohete de primera fase que se encargará de llevar esa carga a altas alturas, el Falcon 9, no caerá sobre el mar como solemos ver en este tipo de lanzamientos, sino que volverá a tierra y aterrizará en un espacio de 10 metros encima de un barco. Es todo un desafío, ya que hasta ahora la compañía solo había “apuntado” a una superficie de unos 10 kilómetros. Pero de esta manera buena parte del cohete podrá ser reutilizada en futuros lanzamientos, reduciendo los costes; Musk quiere reducir los costes a la mitad: si ahora cuesta 2.000 dólares mandar unos 450 gramos de carga al espacio, que cueste 1.000.
Será complicado, pero si lo consigue dará un gran paso en la exploración espacial; y durante el 2015 se intentará una docena de veces mas como mínimo. Un reto caro pero que dará sus frutos.