Descubren cómo se controlan los recuerdos aversivos en el cerebro
Como ya sabéis, la memoria es algo mucho más complejo que recordar y/o olvidar un hecho o evento. Existen varios tipos de memoria, varios tipos de recuerdos, y muchos factores externos que pueden provocar variaciones en ella. Además, es fácilmente alterable incluso por un amigo nuestro, desde luego no es perfecta.
Asimismo, necesita un sistema de seguridad, otorgarnos una serie de recuerdos para que estemos alerta en caso de que se repitan eventos indeseables y así saber como actuar: Los recuerdos aversivos. Dichos recuerdos, también llamados “recuerdos negativos”, permiten a nuestro cerebro evitar amenazas conocidas previamente. Ahora, gracias a un nuevo estudio a cargo de los investigadores del Inserm y la Universidad de Burdeos, sabemos mejor cómo se controlan dichos recuerdos.
Los recuerdos aversivos y los receptores cannabinoides
El estudio, publicado recientemente en la revista Neuron (rama de Cell), coloca como protagonistas a los receptores cannabinoides en el control de los recuerdos aversivos. Y sí, tal y como suenan, este tipo de receptores cerebrales son la diana del cannabis o marihuana.
Como ya hemos comentado, cuando nos enfrentamos a un peligro y tomamos una decisión, nuestro cerebro recuerda si dicha decisión fue buena y la repetirá si se vuelve a encontrar frente a dicho peligro. Esto son los recuerdos aversivos o negativos, los cuales forman parte de los mecanismos neurológicos de nuestro cuerpo que ajustan nuestro comportamiento frente a un estimulo, pues dichos recuerdos aversivos ayudan a la supervivencia humana.
En los últimos años hemos vislumbrado que la región cerebral responsable de estos recuerdos es la habénula, y ahora lo hemos confirmado, asociando el papel clave de los receptores cannabinoides de tipo 1. Dichos receptores se controlan mediante los llamados endocannabinoides o moléculas propias corporales, y también destacan y son conocidos por ser el blanco de las sustancias psicoactivas que contiene el cannabis.
Para demostrar su teoría, los investigadores condicionaron a ratones para reaccionar frente a sonidos u olores como si fuesen señales de peligro. Posteriormente se expuso a ratones deficientes en estos receptores cannabinoides a estos peligros, observando que no expresaban ni miedo ni repulsión, en comparación a los ratones que sí poseían receptores cannabinoides. Paradojicamente, aunque no parecían existir recuerdos aversivos, los recuerdos neutros o los positivos no se alteraron en ningún momento.
Los investigadores opinan que el sistema cannabinoide endógeno situado en la región de la habémula podría ser una futura diana para el tratamiento de diversos trastornos psiquiátricos como la depresión, la ansiedad o la adicción a drogas; pues los recuerdos aversivos pueden ser modificados, pero parece que los recuerdos positivos persistirían sin alteración alguna.
Vía | Neuroscience News.
Fuente | Neuron.