dory

dory

Tecnología

Efecto Nemo y efecto Dory, o cómo el cine puede acabar con ellos

El pez cirujano es la especie encarnada por el personaje de Dory y podría caer en peligro después del estreno de la nueva película de Pixar.

22 junio, 2016 11:30

Noticias relacionadas

Con el reciente estreno de la película “Buscando a Dory“, la preocupación de los científicos por la conservación del pez cirujano va progresivamente en aumento.

Posiblemente esto que os estoy diciendo os suene a chino, pero si os digo que el pez cirujano es la especie encarnada por el famoso personaje de Dory seguro que comenzáis a saber por dónde voy.

Ya en el caso de Buscando a Nemo el estreno de la película dio lugar a un aumento de las capturas del pez payaso por aquellas personas que querían tener pequeños Nemos en sus acuarios personales y, según los científicos responsables del proyecto “Saving Nemo Conservation Fund“, la historia podría repetirse de nuevo. Por eso, hoy dedicamos la sección del animal de la semana a estos dos peces, que no merecen ser llevados a la extinción simplemente por haber dado vida a dos entrañables personajes.

¿Cómo nació el proyecto Saving Nemo Conservation Fund?

pez_payaso-1024x685

pez_payaso-1024x685

El pez payaso, también conocido como Nemo, ya se encontraba en peligro antes del estreno de la famosa película de Pixar debido a las dramáticas consecuencias que está teniendo el calentamiento global sobre los arrecifes de coral, su hábitat natural.

Sin embargo, desde que comenzó el auge del filme, en el año 2003, estos peces también han sufrido un duro golpe debido al aumento de las capturas descontroladas con el fin de poblar los acuarios de aquellos amantes de la película que quieren tener su propio Nemo en casa.

Como resultado, nació el proyecto Saving Nemo Conservation Fund, formado por una serie de científicos pertenecientes a universidades australianas que tratan de dar a conocer el caso, haciendo todo lo posible por conservar la especie, ya que si no se hace nada por evitarlo estos peces están abocados a la extinción.

Según declaraciones a la Agencia Sinc, uno de los objetivos principales de la fundación es la cría de siete especies de pez payaso, ya que se trata de un animal muy fácil de criar en cautividad, con un número muy alto de huevos por puesta y que, tras su nacimiento en cautividad, se adapta muy bien a los acuarios.

Así, si todo el mundo que quiera tener estos peces como mascota optan por la opción sostenible que ellos proponen,  se disminuirá rápidamente el peligro de las especies salvajes.

El efecto Dory que podría poner en peligro al Pez Cirujano

pez cirujano

pez cirujano

Del mismo modo que el pez payaso se adapta bien a la vida en los acuarios; el pez cirujano, poco valorado en la pesca por el olor desagradable y su relación con el envenenamiento por ciguatera, sí que tiene un gran valor como mascota, por lo que los miembros de la fundación creen que la historia podría repetirse después del estreno de Buscando a Dory.

Lo peor de todo es que este caso no se puede controlar del mismo modo que el del pez payaso, ya que tardan muchos años en alcanzar la madurez sexual, por lo que su cría en cautividad es complicada y la única forma de hacerlos llegar a los acuarios privados es la captura directa de los arrecifes en los que viven.

Por eso, si sois amantes de los acuarios y os morís de ganas por tener un personaje de alguna de estas películas, optad por la opción sostenible de Nemo y dejad a Dory nadar entre las anémonas. Al fin y al cabo es ahí donde tiene que estar.

dory

dory