El gigante del comercio electrónico quiere dominar el único ámbito que todavía no controlan: el camino de nuestros paquetes del almacén a casa.
Amazon se ha convertido en el gigante indiscutible de las compras en línea. Comprar algo en la tienda online es casi parte de nuestras vidas. Muchas veces ni nos planteamos acudir a una tienda especializada, o a una tienda normal o corriente, para hacernos con algo. Directamente lo buscamos y lo compramos a través de Internet.
Sin embargo, la compañía de Jeff Bros sigue dependiendo de terceros a la hora de la verdad: hacer que los paquetes lleguen a nuestras casas. Quienes nos traen las cosas son compañías de mensajería como Seur, MRW o Correos. Son conocidos por controlar al dedillo el proceso de pedido y envío, pero nunca habían controlado esto hasta ahora.
Empieza a repartir paquetes Amazon…
La compañía acaba de empezar a repartir paquetes por sí sola en EEUU, incluso si son de vendedores ajenos. Esto significa que el vendedor dejará de tener la libertad de decidir cómo envía el paquete, serán ellos quienes lo hagan. Y pueden decidir usar una compañía tradicional, como FedEx o UPS, o hacerlo ellos mismos.
De momento es un proyecto piloto que despegará en 2018, según Bloomberg. De esta forma podrían prometer envíos en 2 días hasta de paquetes que no estén en sus almacenes, los cuales están saturados. Además, le da la oportunidad de supervisar paquetes incluso estando en manos de un tercero.
Pero no es la primera vez que Amazon intenta tomar el control de este proceso. Los envíos de Prime Now en 1 y 2 horas ya se hacen con su personal en ciertos casos. Y la llamada “Amazon Logistics”, una flota propia de la compañía, ya ha empezado a suplementar a las compañías de paquetería para entregar paquetes más rápido.
…y a abrir tiendas propias
Pero este no es el único campo en el que el gigante está intentando meterse. Otro campo al que quieren llegar son las tiendas que hay a pie de calle. Amazon siempre ha sido una compañía centrada en las ventas en Internet, pero eso no le ha impedido desear colocarse en las calles, a la vista de todo el mundo.
Para empezar, Amazon ha comprado Whole Foods, toda una cadena de supermercados de EEUU. A golpe de billetera se han hecho con una red de tiendas y distribución bien establecida en EEUU. También tienen ya abiertas librerías donde se pueden adquirir los libros que venden en línea. Y no podemos olvidar el experimento de la tienda sin cajas registradoras.
¿Empieza a controlar Amazon todo el proceso?
El deseo de Amazon con todo esto es controlar el proceso por completo. Desde que un producto llega a sus almacenes hasta que llega a nuestras manos, pasando por el proceso de compra y la logística interna. Al final, el gran reto de Amazon es controlar toda la cadena. Todo con la excusa de dar la mejor experiencia al cliente. Sólo el tiempo nos podrá decir si lo consiguen.