Si hablamos de Japón tenemos que hablar inevitablemente del término kawaii. Significa a grandes rasgos “adorable” y la cultura del país está directamente enfocada a ello, poderosamente incentivada por la cultura del anime. Los productos japoneses, siguiendo esas líneas de diseño, también mezclan en su composición algunas de las tecnologías más avanzadas del mundo. Uniendo estos dos mundos tenemos a Lovoto, el robot al que puedes amar y del que seguro te enamorarás. Si tienes el dinero para ello, claro…

Lovoto, un robot que te dará amor y calorcito

¿Qué tiene de especial Lovoto? Robots que bailan en la línea de lo creepy y lo adorable los hay a patadas en Internet. Este robot japonés tiene una particularidad clara: está destinado, como su nombre indica, a sentir afecto y amor por él. Y está equipado con una tecnología muy avanzada que intentará que esto sea posible.

Este robot ha sido creado por Kaname Hayashi y su composición física está basada en unas ruedas y un motor para que nos pueda seguir. Este pequeñín mide 50 centímetros de alto y está recubierto por un manto que imita el pelaje, con altavoz, sensores y más. Porque este robot no está destinado a realizar tareas del hogar; lo que quiere Lovoto es que lo quieras.

Lovoto está incorporado con 3 cámaras que están pensadas para cubrir la profundidad, la temperatura y un ángulo de 180 grados para que pueda mapear el entorno y así no pegarse de morros con lo que encuentre. El robot puede reconocer a hasta 100 personas al mismo tiempo, y su “memoria” puede albergar a 1 000 personas. Sus ojos contienen una serie de capas gráficas (concretamente 6) para crear un movimiento ocular realista y dispone de una serie de sensores que le permiten desplazarse de manera completamente autónoma, por lo que no necesita de mandos para ser dirigido. No podemos esperar mucha inteligencia de Lovoto, por lo que no será absolutamente independiente de nosotros. Según Hayashi, tiene “un nivel de inteligencia algo por encima del de un hámster”.

Con un peso de 3 kilos su anatomía está totalmente recubierta de sensores para la presión y el tacto. Porque sí, querrás abrazar a Lovoto de lo contrario eres un ser sin corazón y este estará preparado para recibir tus mimos. Sus circuitos internos generarán calor y este se derivará a la superficie de Lovot, de modo que además de adorable, será calentito. Su batería, no obstante, es justita; únicamente funcionará (según la web del producto) 45 minutos con una carga de 15 minutos. Su velocidad máxima es de entre 2 y 3 kilómetros por hora y anecdóticamente posee dos procesadores de 4 y 6 núcleos respectivamente además de 8 GB de memoria RAM.

Eso sí, quizás estos abrazos sean los más caros de tu vida. ¿Creías que toda esta tecnología iba a ser barata? Si esa preciosidad de cara te ha hecho querer sacar la cartera dispuesto a comprarlo, tranquilo que te quitamos las ganas: 3000 dólares cuesta la unidad. Aunque el lado bueno es que se puede pagar por unos 90 mensuales. Au.

Ni que decir tiene que este robot busca establecer un vínculo emocional contigo y que le quieras, por lo que si buscas otro tipo de afecto, tienes las muñecas hinchables a tu disposición. El producto curiosamente irá destinado a personas mayores y a mujeres y se empezará a vender en Japón para ver cómo va en el mercado nipón, y en el 2019 comenzará su distribución oficial. La pregunta más obvia es: ¿realmente merece la pena pagar 3000 dólares por un abrazo? Si es de esta cosita peluda por supuesto que sí. Ejem… perdón.