Crean las gafas autofocales, que cambian de graduación dependiendo de dónde estés mirando
Ingenieros han creado unas gafas que cambian de graduación automáticamente usando un algoritmo que analiza la posición de nuestros ojos.
3 julio, 2019 11:03Noticias relacionadas
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No existen dos ojos iguales, y por eso, si tenemos problemas de visión, es necesario ir a un profesional para que nos gradúen la vista y nos ofrezcan la mejor lente posible. Dependiendo de si somos miopes, tenemos astigmatismo o simplemente nos hacemos viejos, es necesario usar un tipo de lente u otro. Sin embargo, en muchos casos tendremos problemas para ver dependiendo de la distancia; las gafas bifocales y progresivas intentan solucionar esto aplicando graduaciones diferentes dependiendo de la zona de la lente: normalmente si dirigimos la mirada hacia abajo es para ver algo de cerca, y si miramos hacia arriba o al frente es para ver algo que está lejos.
Es una solución que funciona, pero que podría ser mejor. Eso es lo que han pensado investigadores de la Universidad de Standford, que han creado unas gafas inteligentes capaces de autoenfocar las zonas que queremos ver, dependiendo del movimiento de nuestros ojos. Están pensadas especialmente para casos de presbicia, es decir, de pérdida de visión por la edad, y eliminan la necesidad de llevar varias gafas para diferentes situaciones, o usar unas bifocales, que pueden provocar mareos a muchas personas, o unas progresivas, que sacrifican la visión periférica.
Las gafas que cambian de graduación automáticamente
Los ingenieros llaman a estas gafas “autofocales”, porque son capaces de cambiar el enfoque en tiempo real dependiendo de dónde estemos mirando. Para ello se han inspirado en los propios ojos humanos, desarrollando lentes llenas de fluido que se expande o se reduce para variar la graduación.
Unos sensores analizan constantemente nuestros ojos y triangulan la zona que estamos mirando y la distancia a la que está el objeto que queremos ver. El algoritmo desarrollado por los investigadores es capaz de usar estos datos de posición para variar la presión del líquido en las “lentes” de manera precisa. Aunque las lentes de líquido no son algo nuevo, en este caso la innovación está en el software creado para modificar su graduación en tiempo real.
El resultado es un prototipo de gafas que, por el momento, es algo aparatoso, pero que una vez que se continúe su desarrollo no debería ocupar mucho más espacio que unas gafas normales. En las pruebas, las gafas fueron lo suficientemente rápidas para la mayoría de voluntarios con presbicia, y les permitieron leer y cambiar su punto focal más rápidamente comparado con unas gafas progresivas.